Los problemas de bajas empiezan a presentarse al Pontevedra al mismo ritmo que se apaga el sol del otoño. Este jueves Capi debió abandonar el entrenamiento que el equipo granate llevó a cabo en el campo de Pasarón. El central notó un pinchazo en los isquiotibiales y decidió dejar la sesión por precaución, para evitar una lesión de gravedad. El defensa vigués sabrá entre este viernes y el sábado si el susto le impide tomar parte en el duelo dominical.
"Quedan dous días para o encontro e veremos como se atopa. Ten que estar ao cen por cento o domingo para xogar. A súa participación dependerá das súas sensacións", explicó su entrenador, Luisito, durante la rueda de prensa que ofreció este jueves al concluir la jornada de trabajo de sus futbolistas.
La duda de Capi se une a las bajas que padecerá el equipo pontevedrés el domingo contra el Izarra. Campillo no estará disponible frente a los navarros, ya que deberá cumplir un partido de suspensión por su expulsión por doble amonestación en el choque contra el Peña Sport.
BAJAS. Otros dos hombres que no estarán a las órdenes de Luisito son Jacobo y Miki, ambos con problemas musculares. El media punta zurdo todavía está pendiente de realizar una ecografía para determinar el alcance de su dolencia. Independientemente del resultado, no podrá jugar contra el Izarra.
A ellos hay que unir la duda de Tomás, que sufre molestias en los abductores y fue descartado por ello de la convocatoria del envite de hace cinco días.
En la sesión del jueves Luisito realizó varias pruebas de cara al fin de semana. El teense recuperó a Tubo para la posición de lateral derecho. El futbolista de Mos podría ser un comodín para esa banda, tanto en la zaga como de extremo. El preparador también probó el tándem formado por Pablo y Bruno en el centro de la defensa.
Capi se retira de la sesión por precaución y es duda para el domingo
Luisito declaró que su presencia ante el Izarra "dependerá das súas sensacións"
