Hubo un tiempo en el que la vocación de Cáritas fue tratar de reinsertar en la sociedad a aquellas personas que se vieron marginadas por razones de tipo económico, pero la crisis obligó a esta organización a replantearse su prioridad, que pasó a ser la de atender las necesidades básicas de los más necesitados.
"La crisis pasa para unos, pero para otros no", advirtió este martes su director, Anuncio Mouriño, en Vilagarcía, después de haber firmado un convenio con el Concello para poner en marcha una iniciativa destinada a promover la creación de empleo utilizando ropa usada.
El documento también fue firmado por el alcalde, Alberto Varela, en un acto celebrado en la Casa Consistorial, al que acudieron los concelleiros de Benestar Social y Relacións Veciñais, Tania García y Lino Mouriño, respectivamente, y el presidente de Cáritas Interparroquial de Arousa, Francisco Fernández.
La recogida de la ropa se realizará en once contenedores identificados por su color rojo y el logotipo de Cáritas, que estarán instalados en varios municipios de la comarca. Actualmente hay once y están distribuidos en Catoira, Cambados y Vilagarcía, donde hay uno, situado cerca de la iglesia de Santa Baia de Arealonga, y en los próximos meses contará con siete.
La ropa recogida será transportada hasta un almacén situado en Santiago, donde será clasificada para, a continuación, distribuirla entre los puntos donde será comercializada.
Inicialmente son tres las ciudades donde habrá establecimientos para esta finalidad, A Coruña, Santiago y Pontevedra, y la cuarta es muy probable que sea Vilagarcía, indicó este martes Anuncio Mouriño. El número de puesto de trabajo que crea esta iniciativa es de nueve y los beneficios que genere serán destinados a ampliar la plantilla.
Una apuesta por la dignidad y la ecología
Cáritas pone en marcha una iniciativa para crear empleo con la ropa usada
"La crisis pasa para unos, pero para otros no", denuncia el director de la organización humanitaria en Vilagarcía
