VILANOVA. La parcela de 4.000 metros cuadrados de superficie en la que se encuentra enclavada la estructura de lo que un día fue la fábrica de conservas Charpo, propiedad del clan de narcotraficantes de Vilanova Los Charlines quedó vallada el jueves 19. Fue el primer paso de la cuenta atrás que podría culminar esta semana.
Los operarios comenzaron a realizar la tarea de retirada del material que se encuentra en su interior, por medio de dos excavadoras de pequeñas dimensiones para que resulten operativas en espacios cortos, y apoyados por otros obreros.
Mobiliario de oficina, estanterías, pilas de envases de cartón que no llegaron a ser usados, bidones de componentes usados en la preparación de las conservas, fragmentos metálicos de las máquinas y cinco camiones aparcados en su interior deberán ser retirados en una primera fase.
Después llegará el momento de retirar, manualmente, la cubierta del tejado, de fibrocemento, así las conducciones y otros elementos adosados a las paredes, como el cableado.
Cuando la nave esté completamente limpia, llegará el momento del derribo de la estructura exterior de una edificación en ruinas que sufrió numerosos incendios, de origen intencionado o derivados de despistes, sirvió de alojamiento de personas sin techo y de nido de amor urgente, y forma parte de la identidad de una localidad.
El alcalde de Vilanova, Gonzalo Durán, precisó que los trabajos se prolongarán, al menos, durante una semana. El regidor arousano subrayó que cuando desaparezca por completo la silueta del edificio, esta localidad ganará una salida al mar en uno de los lugares más atractivos.
En el solar que quedará libre será construido el Teatro Valle-Inclán, sobre una parcela de 2.000 metros cuadrados. En esta iniciativa, el Concello deberá aportar los terrenos, mientras que la Concellería de Cultura y la Deputación se encargarán de su financiación económica.
Proyecto. El proyecto se encuentra en fase de redacción, de la que se encarga un estudio de arquitectura de Ferrol. Estará listo durante este verano. Además de la funcionalidad del edificio, otra de las características de la construcción será la posibilidad de descubrir la fachada más próxima al mar para permitir las actuaciones al aire libre durante el verano.
Esta iniciativa se complementará con la apertura de un vial de circunvalación para permitir el acceso directo al puerto, y para concluir la reforma de la fachada marítima, Gonzalo Durán anunció que insistirá ante Costas del Estado para que ejecute el plan de regeneración de las playas de A Braña y Carteleira, situadas a la entrada de Vilanova, que está paralizado desde hace ocho años, denunció el regidor.
