El consejo extraordinario de Pescanova de este jueves adoptó la solicitud del concurso de acreedores voluntario con el voto en contra de cinco de los doce consejeros que asistieron, según han indicado a Efeagro fuentes conocedoras del desarrollo del encuentro.
Entre los consejeros que votaron en contra de la propuesta del presidente de Pescanova, Manuel Fernández de Sousa, figura la cervecera Damm, Luxempart e Iberfomento, por considerar que había tiempo para negociar con los bancos antes de agotar esa opción.
Las mismas fuentes han apuntado que la mayor parte de la reunión del consejo se dedicó precisamente a tratar este tema, ya que los cinco consejeros que votaron en contra sostenían que había margen de tiempo para renegociar la deuda con la banca, que precisamente había mostrado su apoyo a la compañía y su interés de colaborar.
Sin embargo, una de las peticiones de la banca -que su asesor KPMG pudiera tener acceso a las cuentas- no fue aceptada por la presidencia de la compañía, han añadido.
Según han indicado, la decisión de revocar al auditor BDO Auditores tampoco fue adoptada por todos los consejeros, ya que se consideraba que era "matar al mensajero".
La Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) ha requerido a la compañía que aporte la información completa de las cuentas de 2012, pero hasta el momento no se ha conocido ningún hecho relevante en este sentido.
La multinacional gallega comunicaba ayer la CNMV que adoptaba esta decisión "en aras de la preservación de la continuidad empresarial" y de "la protección de los intereses afectados".
La sociedad recalcaba que tiene "la firme voluntad" de presentar, en el curso del procedimiento, una propuesta de convenio a sus acreedores que "garantice la salvaguarda de los derechos e intereses" de sus trabajadores, acreedores y accionistas, y "la gestión continuada" de Pescanova.
