Xosé Crespo amenaza con tomar "medidas drásticas" si Cuíña no aclara los wasaps de Rueda

El exalcalde de Lalín y senador del PP, Xosé Crespo, tomará "medidas drásticas" -no aclaró cuáles, pero podrían acabar en la vía judicial- si el actual regidor, Rafa Cuíña Aparicio, no aclara públicamente qué pasó con los mensajes de WhatsApp que supuestamente le envió el vicepresidente de la Xunta y máximo responsable provincial del PPdeG, Alfonso Rueda, mostrándole presuntamente el interés de los populares en recuperarlo para sus filas (Cuíña Aparicio fue afiliado popular hasta hace un lustro apoximadamente).

Lo que quiere Crespo -y también Rueda, según le comunicó a éste- es que, o bien diga la verdad (que ha mentido y que tales wasaps no existieron y se los inventó usurpando la identidad del presidente provincial del PP) o que, si como sostuvo ante centenares de personas de Lalín, efectivamente Rueda le envió esos mensajes. En ese caso, según afirmó el exalcalde en Radio Voz, Rueda autorizó a Crespo a retar a Cuíña a que los muestre públicamente, incluido el número de teléfono desde el que fueron remitidos.

Aunque este asunto no saltó a la luz pública hasta el pasado viernes, en el Pleno de marzo, según sostuvo este martes el exregidor, "vén desde antes de Nadal". Por esas fechas fue cuando Rafa Cuíña comenzó a enseñar "a todo can e gato", en palabras de Crespo, unos wasaps en los que supuestamente Rueda demostraba el afecto del partido por Cuíña en detrimento de Crespo. Al respecto, el exalcalde aseveró el martes que "todo iso foi para facerme dano politicamente a min e para fanfarronear el de que o valoran no PP e me mingunean a min, cando é xusto ó contrario. A el non o poden ver".

CIENTOS DE PERSONAS. Una de las medidas que tomará el exregidor (aunque el martes no se refirió a ella) será solicitar la comparecencia en el próximo Pleno de Rafa Cuíña para que aclare pormenorizadamente el asunto de los mensajes de Rueda. Desde Navidad hasta la fecha del Pleno, el pasado 31 de marzo, jornada en la que Crespo saltó con este tema en la sesión, fueron "centos os lalinenses ós que lle amosou as supostas mensaxes do vicepresente". Además de la concejala en activo Marisa Álvarez también vieron esos wasaps -siempre según la versión de Crespo- el exconcejal del PP de Vilatuxe, Toño González, directivos de banca y numerosos empresarios. De hecho, Crespo dijo haberse hartado del tema, del que ya le habían dado noticias, cuando, recientemente, un empresario lo paró por la calle y le preguntó: Qué, cando ides meter a Cuíña para dentro? La pregunta colmó el vaso de la paciencia del exalcalde.

Según el relato de Xosé Crespo, fue entonces cuando se dirigió a hablar directamente con Alfonso Rueda, "que mo negou taxativamente. Pero nin esa nin outra mensaxe lle enviei nunca a Cuíña", le dijo, y le preguntó retóricamente si no le presuponía a él más inteligencia como para dejar constancia por escrito de tamaños comentarios. Rueda, prosigue Crespo, le autorizó entonces a retar públicamente a Cuíña a mostrar los mensajes y el número de móvil. "Non o fai porque senón Rueda denúnciao", expresó el exmandatario de Lalín.

"MENTE ENFERMIZA". "Isto non vai quedar aquí", advirtió Crespo dirigiendo todo tipo de descalificativos, a cada cual más fuerte, a su sucesor. De Cuíña Aparicio opina que "acaba crendo as súas propias mentiras" y que "ten unha mente enfermiza (...). Ten un problema grave e debe de miralo". El senador añadió que "que un personaxe de tal catadura moral se invente e suplante a identidade dun vicepresidente da Xunta é moi grave".

Crespo opina que Rafa Cuíña no logrará salir del embrollo en el que él mismo se metió. "Agora escóndese. É sectario e cobarde", dijo del actual mandatario municipal.