Decomisados más de mil sacos de mejillón con toxina de la ría de Aldán

El Servizo de Gardacostas de Galicia, perteneciente a la Consellería do Mar, interceptó hoy una embarcación que transportaba un total de 1.080 sacos de mejillón con toxina lipofílica procedente de la Ría de Aldán, en Pontevedra, una zona cerrada al marisqueo en la actualidad.

A través de esta operación, los agentes decomisaron en conjunto 54 cuerdas con los 1.080 sacos que una embarcación de la 'Cuarta Lista' trasladaba a la Ría de Vigo. Según informó hoy la Xunta, la tripulación de una lancha auxiliar del buque 'Sebastián De Ocampo', junto con los trabajadores de la embarcación 'Xistral', sorprendieron in fraganti a varios hombres en el momento en el que realizaban el trasbordo del molusco a la batea, por lo que levantaron un acta de infracción.

Los agentes recogieron varias muestras y las mandaron a analizar al Instituto de Tecnología y Ciencias Marinas (Intecmar) --un organismo dependiente de la consellería de Mar que realiza "continuos" análisis en esta zona, según informaron desde la Administración-- confirmando su toxicidad.

Ante los "elevados" índices de toxicidad presentes en los moluscos de la Ría de Aldán, el departamento de la Xunta no preve abrirla al marisqueo "a corto prazo". Con todo, tras los resultados "positivos" obtenidos en las muestras recogidas en la Ría de Arousa, se están reabriendo la mayor parte de los polígonos de bateas, que también se vieron afectadas por la marea roja, un proceso natural que se repite todos los años. Desde el Ejecutivo gallego advierten de que consumir mejillón con toxina lipofílica provoca mareos, vómitos y diarreas.

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