ESTE especialista considera que lo más importante para la sociedad en el ámbito de la salud buco dental es la prevención e incide en la necesidad de someterse a revisiones periódicas. El doctor David Domínguez es especialista es Implantología Oral y cuenta con un dilatado currículum académico y profesional El director del Policlínico Dental Domínguez es licenciado en Odontología por la Universidad Alfonso X el Sabio (Madrid) y Máster en Rehabilitación Oral mediante Prótesis Dental e Implantoprótesis por la Universidad de Santiago. Actualmente dirige el Policlínico Dental Domínguez, situado en el número 5-Entresuelo de la calle Castelao de Pontevedra.
¿Cuál es el secreto para tener una excelente salud buco dental?
— Una buena salud dental empieza por los cuidados básicos, que son: higiene diaria y una limpieza profesional realizada periódicamente. Prevenir, diagnosticar y tratar, esa es nuestra función como especialistas en odontología general. Una boca sana es el principio para mantener una buena salud. Por eso, no nos cansamos de recomendar hacer una buena prevención que comienza siempre por la práctica de una higiene bucal adecuada y por supuesto una revisión periódica.
¿Sitúa usted una buena higiene y una revisión periódica como principios de una buena prevención?
— Si, claro. Son dos medidas fundamentales.
¿La sociedad ha asumido estas recomendaciones?
— En cuanto a la higiene creo que desde hace años hay en la sociedad española un alto grado de concienciación. La mayoría de la gente se cepilla los dientes dos o tres veces al día. En la actualidad es extraño saber de alguien que no se cepille los dientes nunca. Está, por lo tanto, asumido que la higiene es fundamental y eso es bueno. Ha sido un paso muy importante y que está casi plenamente aceptado.
¿Y respecto a la revisión periódica?
— Esta es la segunda recomendación que hacemos los dentistas para mantener una boca sana y que a muchas personas, como es caso de la higiene diaria, le puede resultar repetitiva. Sin embargo, es necesario insistir en ello porque es una práctica que una de cada dos personas no cumple, aún sabiendo que es necesaria y sumamente importante. Tenemos que convencernos de la necesidad de acudir al dentista, al menos una vez al año o antes, si tenemos alguna molestia. Dice el refrán que es mejor prevenir que curar. En el caso de la salud bucal es más fácil evitar desperfectos que arreglarlos. Mi recomendación es acudir al dentista una vez al año, por lo menos o antes si detectamos alguna molestia o problema, o padecemos una enfermedad crónica, como la diabetes, por ejemplo. El tiempo en materia de salud dental es un factor muy importante.
¿En qué consiste la revisión dental periódica?
—En la revisión dental examinaremos la cavidad oral del paciente, los dientes y las encías para detectar caries e infecciones. Pero además tratamos de prevenir diferentes patologías como gingivitis (sobre todo en mujeres embarazadas), enfermedad periodontal, caries, bruxismo e incluso las patologías más graves ante las que puede ser vital y determinante una detección precoz. También se revisa el estado de la mordida y el movimiento de la articulación temporomandibular. Igualmente, en caso necesario, se realiza una limpieza completa de la boca y aportamos pautas de higiene para mejorarla.
¿Qué papel juega la tecnología en la salud buco dental?
—La innovación y la tecnología es una constante en esta especialidad que prosigue su evolución al amparo de las últimas aportaciones científicas. En Policlínico Dental Domínguez invertimos permanentemente en la formación de nuestros profesionales y en novedosos equipos tecnológicos para poder ofrecer a nuestros pacientes un servicio integral de alta calidad. En un futuro próximo, las clínicas dentales estarán totalmente digitalizadas. Se utilizarán estas nuevas tecnologías digitales, por ejemplo, para la detección de caries o para la realización de un sondeo periodontal. Sin embargo, creo que para entonces, los mejores dientes seguirán siendo, como ahora, los naturales. Practicamos siempre una odontología conservadora tratando de salvar las piezas naturales. El objetivo es la reparación de los dientes dañados por caries, fracturas, traumatismos o erosiones mediante su reconstrucción.
¿Cómo está afectando la pandemia a vuestro día a día con el paciente?
—Es inevitable hablar del Covid en estos tiempos. La pandemia, todavía presente, generó una crisis mundial de salud pública, con millones de muertos y unas consecuencias económicas sin precedentes que afectan a los avances en el ámbito de la odontología y que significan un desafío para los profesionales de la salud. Seguimos hablando de nuevas cepas del SARS-CoV-2, de vacunación y de extremar la protección para evitar el contagio. El paciente debe saber que en las clínicas dentales como en cualquier centro de salud aplicamos con absoluta rigidez los protocolos establecidos al objeto de evitar cualquier posible riesgo de contagio y para poder seguir prestando la atención dental y promoviendo la salud oral de la población.
