MARÍN. Dos huertas urbanas de O Sequelo aparecieron ayer destrozadas con varias pisadas en el terreno y varios tomateros y otras plantas arrancadas. Los demás concesionarios de la finca apuntan a una venganza hacia la persona concesionaria de estos espacios por llamar la atención a dos pescadores furtivos dos días antes por pescar en el río Lameira.
"Hace dos días, la chica de las huertas les echó una reprimenda a dos pescadores furtivos que estaban con un ganapán pescando truchas", apunta otro de los concesionarios de una huerta urbana en el lugar. "Yo mismo vi al día siguiente a uno de ellos en la zona como intentando averiguar cuál era el número de la huerta de esa chica", continúa. "Y esta mañana (por ayer) han aparecido las huertas destrozadas", concluye.
Estas afirmaciones han sido corroboradas por la concejala de Medio Ambiente, Marián Sanmartín, con otros concesionarios de estos espacios, que además fueron testigos de la tensa escena entre la afectada y los pescadores furtivos. Sin embargo, por el momento no se ha presentado denuncia alguna ni se ha iniciado ninguna investigación policial, aunque parece ser que una patrulla estuvo presente en el lugar el día del altercado, si bien el hecho no fue a mayores y no se emprendió ninguna acción al respecto.
Sanmartín explica que ante estas situaciones el Concello no puede hacer nada, aunque lamentó que se produjeran estos sucesos. "Hace un mes o más también nos pasó que habían arrancado unas tablas de la caseta de herramientas que hay en el lugar para que los concesionarios guarden sus rastrillos, botas y demás... Imagino que pensando que allí había algo de más valor", explicó.
Por el momento, la afectada ha perdido buena parte de su cosecha, en contraste con las demás huertas que muestran una amplia producción.
