El alcalde de Ponte Caldelas acusa a Rueda de injerencias por cuestionar el cierre del CIM

El alcalde de Ponte Caldelas, Andrés Díaz, ha acusado este jueves al vicepresidente de la Xunta, Alfonso Rueda, de injerencia y de "cuestionar" su legitimidad para tomar decisiones "responsables" sobre un conflicto laboral.

Díaz ha confesado estar "asombrado" por las críticas "absurdas" de Rueda acerca del cierre del Centro de Información a la Mujer (CIM) en su municipio pontevedrés, que será reconvertido en un servicio de asesoramiento legal, una maniobra que el vicepresidente de la Xunta tachó de "inexplicable" ante el repunte de casos de violencia machista.

"Sin duda, Alfonso Rueda está ya en modo campaña para las municipales", ha dicho el regidor, que ha considerado el comentario del vicepresidente gallego como parte de su "obsesión" con la Diputación de Pontevedra y con su municipio, gobernado por una coalición tripartita encabezada por el PSdeG-PSOE, tras casi cuarenta años de alcaldes conservadores.

Díaz ha lamentado que Rueda, un dirigente del PP, haya visitado el municipio vecino de A Lama para, desde allí, criticar la decisión de Ponte Caldelas sobre su CIM, con una agenda "incomprensible" que raya, ha dicho, en el "esperpento" y que supone una "muestra de debilidad" de su partido.

El alcalde caldelano ha acusado al vicepresidente gallego de "inmiscuirse" en la autonomía local de su municipio y de "cuestionar" su legitimidad para tomar decisiones "responsables" sobre un conflicto laboral, los contratos de las dos trabajadoras del centro, que ha sido generado por la "pésima" gestión del anterior alcalde del PP, ha dicho.

Tras enfatizar la "discriminación" que sufre su municipio por parte de la Xunta en materia de inversiones, Díaz ha invitado a Rueda a visitar su Concello para ver las "chapuzas" de su predecesor en el cargo y negociar "cara a cara" las necesidades que tiene actualmente Ponte Caldelas.

Respecto al CIM, Díaz ha asegurado que el Concello de Ponte Caldelas, una vez "reconducida" la situación laboral, tiene intención de volver a solicitar la subvención autonómica para reabrir el centro en 2018 con parámetros "razonables". Ha apuntado que entretanto, las víctimas de la violencia machista serán atendidas por una abogada.