El berberecho y la almeja babosa sobresalen en el retorno al marisqueo

La de ayer fue la primera jornada de trabajo tras 60 días de parón. gonzalo garcía
photo_camera La de ayer fue la primera jornada de trabajo tras 60 días de parón. gonzalo garcía

La primera jornada de faena para las mariscadoras de San Telmo, Lourizán y Raxó tras dos meses de parón forzoso, provocado por la presencia de la marea roja, que afectó con gran intensidad a toda la ría de Pontevedra, estuvo marcada por la importante cantidad de berberecho capturado. De los más de 793 kilos de molusco subastados en la tarde de ayer en la lonja de Campelo, más de de la mitad (concretamente 555 kilogramos) pertenecían a este bibalvo.

En el extremo opuesto se encuentra la almeja fina, que prácticamente brilló por su ausencia en esta toma de contacto con la ría. La cantidad que salió a subasta apenas superó los 200 gramos. También destacó la escasa cantidad de almeja japónica (menos de diez kilos), cuyo precio medio en las pujas osciló entre los 32, 03 y 23,22 euros por cada 1.000 gramos.

Con respecto al berberecho, la mayor cantidad corresponde al perteneciente a la clase A, de la cual se sacaron a subasta 423,10 kilogramos. Según los datos facilitados por la lonja de Campelo, el precio medio en esta categoría se fijó en 11,76 euros. Por su parte, las unidades correspondientes a la clase B se quedaron en 8,2 euros por kilo.

Sin llegar a estas cantidades, la almeja babosa también tuvo su cuota de protagonismo. Las capturas de este bibalvo sobrepasaron los 228 kilogramos. La subasta de clase especial fijó un precio medio de 17,49 euros, mientras que la clase A se quedó en 13,85. Por último, la B alcanzó los 10,41 euros.

Se da la circunstancia de que estas cifras son sensiblemente menores a las obtenidas en noviembre del año pasado. Fue entonces cuando las mariscadoras retomaron su actividad después de verse obligadas a parar durante tres semanas. En aquel entonces, la presencia de marea roja también fue la responsable de esa situación. En aquella subasta se despacharon más de tres toneladas de molusco.

A pesar de que los precios fijados ayer no fueron excesivamente altos, el sector mostró su satisfacción por el hecho de volver a la ría. En esta línea se expresó la máxima responsable del pósito de San Andrés, María del Carmen Nores, que reconoció que «ya teníamos ganas de retomar el trabajo». Además, confirmó que aún no están resueltas las solicitudes de compensación por el paro.

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