Las altas temperaturas volvieron a dar un presagio del que puede ser un mal verano para los pueblos rodeados de masa forestal en la comarca.
En el caso del municipio de Barro fue el incendio de eucaliptal en A Portela el que se reavivó después de una jornada de calma.
El fuego se inició el pasado domingo, al mediodía y quemó unas 25 hectáreas entre el domingo y el lunes. Una brigada se tuvo que desplazar a la zona, por la subida de O Pontillón do Castro, porque uno de los frentes cobró nueva vida. No fueron los miembros de Protección Civil ni medios aéreos al ser una zona de monte, no de viviendas, y haber otros incendios activos en el entorno.
Uno de estos fuegos fue el de Viascón, que comenzó como un discreto incendio en cuya extinción, en la ladera del Monte Castelo colaboraban los vecinos, y acabó siendo de los más relevantes de la jornada, después de calcinar más de 35 hectáreas de monte arbolado en sus primeras horas (desde las 15.50 hasta las 22.00 horas) y seguía activo al cierre de esta edición.
Aunque inicialmente parecía que el fuego acabaría tras calcinar la ladera del Castelo, el viento cambió a media tarde y los dos frentes que había se unieron en una gran lengua que avanzó vertiginosamente hacia Tenorio. El miedo del regidor local, Jorge Cubela, era que por la noche, cuando no es posible contar con tantos medios, las llamas alcanzasen las vivendas de la parte alta de Tenorio, la parroquia vecina.
Alarma
A las tres de la tarde empezaban a alarmarse los vecinos de Viascón, en Cotobade. La humareda que salía del Monte Castelo se empezó a acercar a la parroquia. Se pidieron medios, pero estos no llegaban. Un bulldozer hacía cortafuegos, pero ninguna cuadrilla atajaba las llamas.
A medida que avanzó la tarde y las condiciones cambiaron, los agentes forestales tuvieron que reparar en este incendio, que, tras cambiar de dirección cobró mayores dimensiones. El personal existente se fue retirando de otros fuegos, como el de Lérez y, al cierre de esta edición participaban ocho helicópteros e hidroaviones en la extinción, además de tres brigadas y dos palas.
El alcalde aclaró que la cantidad de medios le parecía suficiente, en ese momento, ''aínda que a principios de xullo espero que todo mellore coa incorporación do persoal dos convenios, e poidamos ter un maior control dos lumes''.
El fuego no es el primero que se registra en Cotobade, ya a las dos de la madrugada del mismo día se declaró un incendio en a Atalaia que atravesó la N-541 y llegó a la parte de Salgueirón.
