Antonio Camacho, condenado a once años de prisión por apropiación indebida y falsedad documental en el caso Gescartera, disfruta ya de permisos penitenciarios después de haber cumplido en octubre del año pasado la mitad de la pena que le fue impuesta.
Camacho, que cumple condena en la prisión de Aranjuez, reúne los requisitos fijados por la ley -como, además de haber cumplido una parte importante de la pena, el de estar clasificado en segundo grado penitenciario- y está haciendo uso estos días del segundo de los permisos que se le han concedido hasta la fecha.
El cerebro del caso Gescartera -una agencia intervenida en junio de 2001 por la Comisión Nacional del Mercado de Valores y en la que se detectó un "agujero" patrimonial de más de 80 millones de euros- tiene derecho a disfrutar de 36 días de permiso anuales, en periodos máximos de seis días.
Durante los permisos, el penado no puede abandonar el territorio nacional y debe estar localizable en su domicilio.
Los permisos son concedidos por la Junta de Tratamiento de la prisión -que tiene en cuenta factores como el arraigo familiar- y deben ser aprobados por el juez de Vigilancia Penitenciaria previo informe de la Fiscalía.
Camacho ingresó en la cárcel el 17 de julio de 2001 y permaneció en prisión preventiva hasta el 2 de julio de 2004, cuando salió en libertad bajo fianza de 300.000 euros.
El 27 de marzo de 2008, la Audiencia Nacional le condenó a once años de prisión -pena confirmada el 18 de noviembre de 2009 por el Tribunal Supremo- y ordenó su reingreso en prisión.
