El Gobierno local se muestra dispuesto a negociar el nuevo convenio laboral, pero no antes del próximo otoño. Así lo manifestó este miércoles la concelleira de Persoal, Vanessa Rodríguez, que insistió en que las conversaciones no se iniciarán hasta que se audite la situación del personal del Concello, así como de Nauta y de Terra de Sanxenxo. "Consideramos que esa auditoría (que ha sido contratada a una empresa externa) es imprescindible para que podamos tomar ediciones", enfatizó la edil de Sanxenxo Agrupación Liberal (SAL), que estima que los resultados del estudio no se conocerán hasta octubre.
La edil de Persoal considera que, teniendo en cuenta que el último convenio se firmó en 2005, esperar a octubre "no es descabellado"
A este respecto, Rodríguez Búa corrobora que la decisión de no hacerla antes tiene que ver con que los meses de verano, período en el que se incrementa de forma notable el número de trabajadores municipales, son los más adecuados para analizar el funcionamiento tanto de los departamentos del Ayuntamiento como de las empresas públicas. Además, la concelleira de Persoal negó rotundamente que el Gobierno sanxenxino esté dando largas a la negociacion que exigen los comités de empresa, que recuerdan que el anterior convenio laboral data del año 2005. La edil opina que los empleados están al tanto de los plazos que se barajan para abordar este asunto y considera que, teniendo en cuenta que el último acuerdo data de hace más de una década ,establecer un calendario de negociación a partir del próximo mes de octubre "no es algo descabellado". Rodríguez reiteró que "nuestra predisposición a la hora de colaborar, negociar y dialogar con la plantilla es total, pero siempre y cuando se produzca dentro de los plazos que ya hemos establecido, porque entendemos que es prioritario saber en qué realidad nos estamos moviendo".
AUDITORÍA INNEGOCIABLE. Aunque los representantes sindicales reconocieron el pasado martes que la contratación de una auditoría externa ha generado desconfianza entre los empleados, el Gobierno municipal cree que esta actuación es innegociable, ya que considera que se trata de una herramienta ideal para "analizar la situación real de la plantilla municipal".
Vanessa Rodríguez recordó que ya transmitió esta postura a los empleados en una reunión que mantuvo con ellos a principios de este mes, en la que les facilitó todos los detalles relativos al coste, a los plazos de ejecución y a las razones por las que se ha realizado esta contratación. "Ellos fueron los primeros en conocer cuál es el primer paso que da el Gobierno en este sentido. En la misma reunión les trasladé cuál será el calendario de trabajo que maneja el Gobierno local en este tema. Los trabajadores admiten que hay deficiencias en determinados servicios y que no todos funcionan todo lo bien que cabe esperar, por lo que la auditoría es imprescindible".
