El Hospital Miguel Domínguez de Pontevedra anunció hoy la inmediata puesta en funcionamiento de un equipo multidisciplinar que permitirá atender, a cualquier hora del día y durante todo el año, a pacientes afectados por un infarto cerebral.
"Es imprescindible reconocer al paciente en tiempo y forma", señaló el doctor Raúl González, tras asegurar que "la actuación es fundamental en las tres primeras horas de sufrir esta dolencia, mientras que pasado ese tiempo empieza a ser peligroso".
Ésta es la finalidad del protocolo de actuación que pone en marcha el Hospital Miguel Domínguez, pionero en Galicia, con el convencimiento de que de este modo se hace frente a la "obligación de acortar todos los tiempos hospitalarios".
En concreto, ante el ictus cerebral los protocolos establecen que, para obtener la máxima respuesta, un paciente debe recibir tratamiento en los primeros 60 minutos desde que entró en el hospital.
Buenos resultados
"Aproximadamente el 40 por ciento de los pacientes que son tratados correctamente tienen buenos resultados funcionales al cabo de seis meses, frente a un 25 por ciento de enfermos si no son tratados antes de esos tiempos máximos", explicó el doctor González.
Para ello se estableció este protocolo que fija la participación y actuación de los servicios de Urgencias, Medicina Intensiva, Radiología, Laboratorio, Neurología, Medina Interna y Enfermería, al estimar que "el tiempo es clave para reducir las posibles secuelas y lograr una recuperación importante".
El doctor González consideró que hasta ahora la población no dio una "importancia vital" a esta urgencia, si bien señaló que cada vez está más patente en la sociedad "por la forma de vida y las costumbres dietéticas y sociales".
