La Autoridad Portuaria de Marín y Ría de Pontevedra pondrá en funcionamiento en las próximas semanas la ampliación de la terminal de descarga de fruta, cuya obra quedó totalmente finalizada esta semana. Se trata de la denominada Prolongación del Muelle Comercial Sur, que, en realidad, fue reconvertir una escollera en zona de atraque.
Concretamente, la actuación, con una inversión superior a los cuatro millones de euros y que se financió con cargo a Fondos de Cohesión de la Unión Europea, incluyó la continuidad del muelle frutero hacia el Oeste y la terminación del Muelle Comercial Oeste.
De este modo, la terminal de frutas, que es una de las grandes apuestas de futuro de la Autoridad Portuaria, se dispondrá de una zona de atraque de 210 metros de longitud u de un calado de once. Asimismo, se incrementó el Muelle Oeste hasta los 315 metros y los 15 de calado.
La eliminación de la escollera y la construcción de la nueva línea de atraque ha supuesto también la creación de una explanada contigua de más de 5.000 metros cuadrados, que permitirá ampliar la zona de operaciones y expedición de la mercancías que llega a la rada marinense.
El Puerto de Marín se ha convertido en los últimos años en un referente en la Península Ibérica en lo que a tráficos de fruta procedente de Centroamérica y Sudamérica se refiere, al tiempo que actúa como puerto hub o punto de redistribución de esta mercancías para su reenvío a los destinos finales en España y Portugal.
Tanto es así que Marín posee la única terminal de fritas de Galicia y de toda la costa Atlántica peninsular. Esta infraestructura hizo posible la expansión de la empresa Dart, que cuenta con ocho cámaras frigoríficas que suman una capacidad de 30.000 metros cúbicos, otros mil metros cuadrados climatizados para la clasificación de la mercancía y siete muelles de carga que prestan servicio las 24 horas de los 365 días del año.
A esto se añade la capacidad de atraque y almacenamiento adicional que permite la terminal de contenedores que gestiona la empresa Pérez Torres, con 500 metros de longitud, calados de hasta 14 metros y 330 conexiones reefer para los recipientes climatizados para el mantenimiento de la fruta en la temperatura adecuada.
Esta infraestructura se añade a la larga experiencia en el tráfico de fruta, la coordinación entre navieras, operadores portuarios, organismo de inspección y Autoridad Portuaria, lo que permite que la mercancía alcance su destino final con la agilidad, eficiencia y calidad que exigen los clientes.
FERIA. Este potencial, que, en parte, ya está siendo aprovechado, será promocionado en la feria Fruit Attraction que se celebrará desde el miércoles y el viernes próximos en Madrid, en la que el Puerto de Marín contará con un stand propio.
Se trata de la mayor feria hortofrutícola española y reunirá a más de un millar de expositores internacionales. El objetivo será dar a conocer los medios con los que cuenta la rada marinense para este tipo de tráfico y tratar de captar nuevos clientes.
Una de las grandes bazas actuales es el buen funcionamiento de la escala en Marín de la línea regular entre el Caribe, México y el Norte de Europa de la naviera alemana Hamburg, una de las 20 firmas de transporte de mercancía en contenedores más importantes del mundo, que principalmente descarga fruta y pescado congelado y que tiene un objetivo de movilizar más de 200.000 toneladas al año, según las estimaciones realizadas en su presentación.
Así, desde noviembre del año pasado, la villa marinense es la primera escala europea de esta línea regular semanal, que parte desde México (ciudades de Veracruz y Altamira), pasando por la costa del Caribe hasta Cartagena, en Colombia, y toma luego dirección a Europa. Tras la parada en Marín, continúa hacia Amberes, Hamburgo y Londres, para regresar de nuevo a América.