El viaducto que cruza el río Ulla, parte del trazado de la Línea de Alta Velocidad Ourense-Santiago, será el más alto del trazado español de alta velocidad cuando esta conexión entre en funcionamiento. Esta obra ha sido visitada por el presidente de Adif, Antonio González Marín, para comprobar la evolución de los trabajos.
Según ha explicado Adif en un comunicado, la infraestructura, actualmente en obras, tiene una longitud de 630 metros y se apoya sobre nueve pilas ''directamente sobre el terreno'', con una altura máxima que supera los 116 metros, y pilastras que descansan sobre un arco de 168 metros de luz que salva la corriente.
La ''auténtica dificultad'' de la construcción, según Adif, residió en el empleo de dos carros de avance en voladizo, uno para cada semiarco.
La obra, situada en el subtramo Silleda-Vedra-Boqueixión (entre las provincias de Pontevedra y A Coruña) de la conexión ferroviaria entre Ourense y Santiago, ha sido visitada este jueves por el presidente de Adif, quien ha supervisado asimismo el resto de los trabajos del subtramo, que actualmente se encuentra en fase de montaje de vía e instalación de elementos de la infraestructura ferroviaria.
MINA DE SERRABAL
Dentro del mismo subtramo, el presidente de Adif acudió a unas obras complementarias realizadas a lo largo de 2.148 metros de longitud para evitar las proyecciones de material generado como consecuencia de las voladuras producidas por la explotación a cielo abierto en la concesión minera Serrabal.
La solución adoptada consiste en la construcción de una bóveda de 8,3 metros de radio, constituida por una sucesión de pórticos prefabricados de hormigón armado dispuestos cada seis metros sobre los que se apoyan nueve placas curvas de hormigón armado de 16 centímetros de espesor que cubren aproximadamente las dos terceras partes de la sección.
