Mónica Lorenzo, la última víctima mortal de violencia machista en Galicia, ha sido enterrada esta tarde en el cementerio del municipio pontevedrés de Marín (Pontevedra), a donde se han trasladado familiares, amigos y vecinos de la fallecida.
El cortejo fúnebre salió pasadas las 16.00 horas desde el tanatorio de la localidad para la celebración del funeral en el Templo Nuevo y, posteriormente, del entierro en el cementerio.
El lunes, Mónica de 38 años fue asesinada por su marido, de 48, en el municipio pontevedrés de Barro. El hombre se quitó la vida tras alertar vía telefónica a la Guardia Civil del crimen.
Los hechos se produjeron en el domicilio familiar, una vivienda en la que se encontraban las dos hijas menores de la pareja.
En este caso, la víctima no había interpuesto ninguna denuncia por maltrato.
