A ESTRADA. El alcalde de A Estrada, José López (PP), lo planteó como una posibilidad hace unos días y ayer el concejal de Facenda, Alberto Blanco, lo confirmó a esta Redacción. El Concello estradense delegará en el organismo de gestión y recaudación de impuestos de la Deputación, el Oral, el cobro del IVTM (Impuesto de Vehículos de Tracción Mecánica) y de las tasas del agua, del saneamiento y de la recogida de basura. Dado que la Administración estradense ya tiene traspasada al Oral la recaudación del Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) y el de Actividades Económicas (IAE), en 2014 será la entidad provincial la que recaude la totalidad de los impuestos y tasas que los estradenses han de tributar a las arcas municipales.
El estudio económico relativo a esta delegación no está todavía terminado, pero la decisión del Gobierno ‘popular’ es firme barajando unas cifras provisionales con las que la oposición (PSOE y BNG) discrepan totalmente. El edil de Facenda concretó ayer que la intención del Ejecutivo es tener listo el citado estudio, así como los informes al respecto de Tesorería, Intervención y Secretaria para poder llevar el asunto a Pleno antes de finales de año, el mismo propósito que se plantea con la aprobación del presupuesto de 2014.
Lo que el Gobierno de López ve como un claro «ahorro», la oposición lo tilda de «despilfarro» y, en palabras del concejal nacionalista, Xosé Magariños, «da maior estafa que viu A Estrada en moito tempo». Según los cálculos que echó el nacionalista (basándose, dice, en el presupuesto de 2013), la delegación de todos los impuestos y tasas municipales en el Oral les costará anualmente a los vecinos 408.000 euros. Escuchada la cifra que aportó ayer por la mañana el nacionalista, el concejal de Facenda aseguró que «é unha barbaridade» y que, a lo sumo, el incremento que supondrá en términos absolutos tal delegación no sobrepasará los 150.000 euros.
Blanco matiza además esta cifra hasta tal punto que asegura que, en la práctica, al Concello, y por extensión, a los vecinos les saldrá gratis la firma del convenio con el Oral. Y es que, según el edil, «co aumento da recadación que se vai producir como consecuencia da delegación no Oral xa se paga o incremento que supón a xestión indirecta». Blanco lo explica del siguiente modo: en diciembre finaliza, y sin posibilidad de prórroga ni de contratar a un técnico en administración tributaria, la encomienda de funciones que tiene como recaudadora una de las administrativas del Concello. Así pues, ésta no podrá seguir realizando labores de inspección -de hecho, dice Blanco, Secretaría, cuestionó la labor- y, por ende, el Concello no podrá atajar los casos fraudulentos detectados en servicios como el del agua. Solo en éste, argumenta, «temos uns 1.200 clandestinos», esto es, usuarios reales que no están pagando por el servicio. En consecuencia «estamos consentindo que haxa estradenses de primeira e de segunda», asunto que se zanjará con la gestión del Oral, que sí tiene plena postestad de inspección, además de la recaudatoria.
Ahorro municipal
A este aumento vía recaudatoria, el concejal de Facenda estradense suma el ahorro que para las arcas municipales supondrá dejar de gestionar los impuestos y tasas que aún recauda. La Administración local, remacha, ahorrará en gastos de impresión y correspondencia. La cifra podría rondar los 25.000 euros, señala Blanco.
Y el edil aún suma otra cuestión más: el personal del departamento de recaudación (cuatro trabajadores) quedará liberado para ocupar otros puestos que, debido a la normativa estatal, el Concello no puede cubrir mediante contrataciones. Es el caso, dice, de gestión de personal o Intervención.
