Aparcar el coche en Vilagarcía no resulta gratis para muchos automovilistas que estacionan sus vehículos en la Zona Tir, Fexdega o las inmediaciones de la Praza de Abastos, porque a pesar de que no tienen que pagar al Concello, por tratarse de zonas de uso libre, lo hacen al gorrilla que se les acerca, sabiendo que su contribución les garantiza que no sufrirá deterioro alguno.
Además del temor, las amenazas también forzaron el pago en no pocas ocasiones, y hay lugares, como el aparcamiento situado detrás de la Praza de Abastos, donde es frecuente la actitud violenta de quienes ser arrogan un derecho que no les corresponde.
El alcalde, Tomás Fole, reconoció hoy la impotencia del Concello para poner fin a una práctica que está en la frontera de la extorsión, pero lo hizo después de enviar un reproche a los vilagarcianos. «Ningún ciudadano se atreve a denunciar y no basta con la queja», dijo en una rueda de prensa.
Detenciones
A continuación, dijo que los ciudadanos que sí presentaron una denuncia pudieron constatar, que entran por una puerta y salen por la otra. «Media hora después de las detenciones están fuera de la Comisaría», afirmó el alcalde.
«No sé qué hacer», dijo a renglón seguido cuando fue preguntado qué solución tiene previsto darle al problema, y subrayó que en el mismo atolladero se encuentran otros concellos sin que ninguno fuese capaz de atajarlo. El regidor agregó que su misma sensación de incapacidad pudo constatar entre los representantes del Cuerpo Nacional de Policía y la Guardia Civil en las reuniones de la Junta Local de Seguridad de Vilagarcía.
Fole aprovechó la ocasión para recordar que la oposición se preguntó en un pleno qué pasaría con los gorrillas si no cobrasen por un servicio que nadie les solicita y lamentó que no fuese posible el acuerdo para que se encargasen de esta labor organizaciones humanitarias para recaudar fondos. Claro que si hubiese funcionado, lanzó una pregunta: «¿Qué haríamos entonces con ellos?»
Acuerdo para estacionar en la Praza de Abastos
Las manifestaciones de Fole, tuvieron lugar durante una rueda de prensa convocada con urgencia para abordar la regulación de los estacionamientos frente a la Praza de Abastos, en una jornada en la que los puestos permanecieron vacíos al haberlo acordado así los vendedores para exigirle una respuesta a su demanda, para lo que acabaron concentrándose en la Casa Consistorial.
Después de una reunión que reconoció tensa, el regidor subrayó que la búsqueda de aparcamientos es una tarea que corresponde a los placeros, recordó que fracasaron que todas las gestiones del Gobierno local para encontrarlo, y dijo que habían llegado a un acuerdo que permitirá ganar 20 plazas, y que pasa porque los vendedores respeten la señal que indica que deben abandonarlas antes de las 10.00 horas, después de descargar.
