El cáncer de mama es la enfermedad oncológica más frecuente en la población femenina y constituye la primera causa de mortalidad por cualquier tumor en mujeres. La buena noticia es que la supervivencia asociada al tumor ha mejorado de forma muy notable en las últimas cuatro décadas, en parte debido a la detección precoz que recomienda la Asociación de Diagnosticadas de Cancro de Mama (Adicam) y que este miércoles dio un paso importante en esta tarea de prevención con la inauguración de un local social en Pontevedra.
La entidad que preside Olga Sotelo efectuó una suelta de globos de color rosa (el tono presente en las campañas de lucha contra el cáncer de mama) en la Praza da Peregrina para celebrar su llegada a la Boa Vila. El Concello le cedió una oficina (la número 56) en la Casa Azul.
Las directivas de Adicam inician su labor de asesoramiento en la Boa Vila "muy emocionadas, esperanzadas e ilusionadas". Su presidenta reconoce que afrontan esta etapa "con muchas ganas y con un poco de miedo porque no es lo mismo desarrollar un trabajo en Cangas, donde está situada la sede de la entidad, que en Pontevedra, que es una ciudad grande".
Aunque el miércoles fue el estreno oficial de la oficina de la Casa Azul, Adicam ha comenzado hace un mes a recibir en ella las primeras consultas. Algunas mujeres ya se puesto en contacto con la asociación para preguntar qué tipo de ayuda les ofrece. "Prestamos apoyo psicológico y de índole social", subraya Olga Sotelo. Precisa que efectúan el asesoramiento todos los miércoles, desde las 10.00 hasta las 14.00 horas.
Durante el acto público la presidenta de Adicam lanzó el mensaje de que "lo más importante en la lucha contra el cáncer de mama es la prevención". Sobre esta máxima giró la charla enmarcada en la iniciativa Apálpate que ofreció una integrante de este colectivo en la Casa Azul, con consejos de cómo debe realizarse una autoexploración mamaria. Según Olga Sotelo, esta prueba, que "solo requiere de cinco minutos", resulta "de lo más sencillo y es muy importante para que las mujeres de cualquier edad puedan acudir al médico en cuanto perciban el mínimo síntoma de que puedan tener un tumor".
Adicam asesora todos los años a mujeres con edades que van desde los poco más de 20 años hasta los 70 que han desarrollado un tumor. "Cuanto más pronto se detecte más fácil es la solución y más corto el proceso curativo", insiste la dirigente de la entidad.
Beatriz Arbones es una de las mujeres que forman parte de ADICAM. Los médicos le diagnosticaron a esta viguesa un cáncer de mama en 2014. "Estoy totalmente recuperada, tal y como lo evidencian los resultados de las pruebas de seguimiento a las que someto cada cierto tiempo", explica, convencida de que la rápida detección del tumor fue clave en su veloz recuperación.
"Me hice una autoexploración mamaria en la que detecté un pequeño bulto. Acudí al ginecólogo y en menos de un mes ya estaba operada y a tratamiento", explica Beatriz, a quien no le importa dar a conocer su caso para aconsejar a las mujeres que "es muy importante explorarse y estar atentas a cualquier cambio en la morfología de la mama, decoloración o aparición de cualquier granito o erosión".
Beatriz asegura que, como la mayoría de las mujeres diagnosticadas de cáncer de mama, tras la cirugía y el tratamiento lleva "una vida completamente normal".
"Tenemos la suerte de que hoy por hoy el cáncer de mama es el único de índole oncológica que se cura en el 80% de los casos. Vale la pena detectar la enfermedad cuanto antes para formar parte de los casos que están dentro de esa estadística".
