La Casa del Rey quiere una proclamación ''solemne'' pero también ''austera''

Los actos de abdicación del Rey y de proclamación de Felipe VI de la próxima semana han sido preparados por la Casa Real bajo la filosofía de que "tengan la solemnidad y dignidad que requieren unos acontecimientos históricos, junto a los criterios de austeridad que recomiendan los tiempos que corren".

Un portavoz de Zarzuela ha señalado también que se ha buscado no olvidar "la cercanía y la decisión de celebrar la proclamación del nuevo Rey con los ciudadanos que quieran asistir a los actos en las calles o plazas de Madrid, que serán engalanadas para la ocasión".

"El protagonismo del acto de abdicación corresponde al Rey don Juan Carlos, mientras que el de proclamación corresponderá al Rey don Felipe", subraya la misma fuente, al anunciar algunos detalles de las dos ceremonias históricas.

El miércoles 18 a las seis de la tarde se celebrará en el Salón de Columnas del Palacio Real de Madrid la ceremonia de sanción y promulgación de la Ley Orgánica por la que se hace efectiva la abdicación del Rey Juan Carlos I.

Al día siguiente, a partir de las 10.30 horas, tendrá lugar en el Palacio de las Cortes la sesión conjunta del Congreso y el Senado para la proclamación del nuevo Monarca Felipe VI, en la cual don Felipe jurará la Constitución en los términos previstos en la Carta Magna.

Después, tras un desfile militar a las Puertas del Congreso, don Felipe y doña Letizia harán un recorrido por las calles de Madrid que acabará en el Palacio de Oriente, donde saludarán desde el balcón principal, acompañados de la Princesa de Asturias y la infanta Sofía, así como de don Juan Carlos y doña Sofía.

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