La factura electrónica eleva el pago a proveedores municipales de 23 a 50 días

Los funcionarios tardan más en tramitar las facturas por la vía digital que en formato papel. El Concello detecta problemas técnicos y de adaptación al nuevo sistema de pago

La implantación obligatoria de la factura electrónica para las empresas que trabajen para las administraciones públicas ha provocado más problemas que soluciones desde su entrada en vigor, a mediados del pasado mes de enero. Así lo ponen de manifiesto las estadísticas del Concello de Pontevedra, que revelan que la puesta en marcha de este nuevo sistema provoca más retrasos en el pago a proveedores municipales. Si en 2014 el Gobierno local tardaba una media de 23 días en satisfacer sus deudas con terceros, al cierre del segundo trimestre de 2015, la demora se ha situado en casi 51 días, concretamente en 50,85.

El concejal de Economía e Facenda, Raimundo González Carballo, vinculó estos datos, que hizo públicos este jueves en una rueda de prensa, a cambios en los criterios de recepción y tramitación de las facturas. Según el edil nacionalista, los funcionarios del Concello tardan más tiempo en resolver este tipo de expedientes por la vía digital que en formato papel. "Antes un funcionario tardaba dez minutos en pasar unha factura, o que agora lle leva toda a mañá porque hai que ir unha por unha. Non se pode facer de forma conxunta", explicó. La implantación obligatoria de la factura electrónica puso ya en alerta al Gobierno local a principios de este año, cuando detectó problemas técnicos en la plataforma que el Ministerio de Hacienda puso en marcha para que las empresas que realizan algún tipo de trabajo o servicio para las administraciones reclamen el pago de sus recibos. "Isto provocou moitas dificultades", recordó González Carballo, que afirmó además que en Pontevedra tendrá que evitarse que la ausencia de un trabajador público (sea por libranza, baja u otros motivos) repercuta negativamente en el pago a proveedores.

"Agardemos que a situación se vaia normalizando cara a finais de ano", dijo este jueves el concejal de Economía e Facenda

EL TOPE: 60 DÍAS. A pesar de estos contratiempos, el Concello sigue cumpliendo la Ley respecto al abono de facturas a empresas, un período que pasó de 30 a 60 días a raíz de la implantación del nuevo servicio digital.

"Agardemos que a situación se vaia normalizando cara a finais de ano", dijo el edil del BNG, que informó de que el Gobierno local desembolsó casi nueve millones de euros a proveedores entre abril y junio de este año, un 30% más que durante el trimestre anterior.


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