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La instalación del dique flotante de Portonovo se realizará en primavera

Aunque la construcción de la infraestructura se iniciará próximamente en una fábrica, no será hasta dentro de unos tres meses cuando se inicie su colocación en la lámina de agua
El objetivo del dique de Portonovo es acabar con los daños que genera el oleaje en algunos pantalanes
photo_camera El objetivo del dique de Portonovo es acabar con los daños que genera el oleaje en algunos pantalanes

Habrá que esperar hasta la próxima primavera para ver los avances en la construcción del nuevo dique de abrigo del muelle de Portonovo. Aunque está previsto que la construcción de la infraestructura se inicie en los próximos días, Portos de Galicia aclara que la primera fase de la obra se llevará a cabo en una fábrica. Las tareas de colocación y consolidación no se realizarán "hasta dentro de dos o tres meses aproximadamente", tal y como señalaron este miércoles fuentes del ente presidido por José Juan Durán. 

La Administración autonómica corrobora, asimismo, que la empresa adjudicataria, Construcciones López Cao, ha iniciado ya los trámites para hacerse con todo el material necesario para montar el dique flotante. Cabe recordar que la adjudicación de la actuación, cuyo presupuesto supera los 580.000 euros, se realizó hace apenas unas semanas. 

Portos confía en que el dique esté operativo el próximo verano, un hecho que, en principio, parece factible, ya que los plazos de actuación establecidos son de seis meses. De esta manera, los trabajos podrían finalizar antes de que concluya la temporada estival de 2017, siempre y cuando no se produzca ningún contratiempo inesperado. 

El departamento dependiente de la Xunta de Galicia apuesta por la contrucción de esta infraestructura para poner punto y final a los daños que genera el oleaje en algunos de los pantalanes situados en las proximidades del Club Náutico de Portonovo, especialmente cuando se registran fuertes temporales. Tal y como se recoge en el estudio previo, realizado para analizar la situación de la dársena de la villa sanxenxina, los rompeolas flotantes son una solución ideal para poner fin a estos problemas. 

Además, otras de las ventajas que presentan este tipo de infraestructuras es, precisamente, su facilidad de transporte, la posibilidad de prefabricación en tierra firme y la relativa sencillez de los trabajos de instalación en la propia lámina de agua. En el caso del dique de Portonovo, se trata de un equipamiento de 80 metros de extensión, situado en una línea paralela a los pantalanes de las embarcaciones deportivas. Estará formada por cuatro módulos de cinco metros de ancho y veinte de largo. Asimismo, estos bloques se cimentarán con el empleo de líneas de fondeo.

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