La otra reina de Berlín

MIENTRAS LA canciller alemana Ángela Merkel sudaba la gota gorda en el camino de Santiago en una visita que ha acaparado portadas en toda la prensa nacional y autonómica, una nadadora española, Mireia Belmonte, entraba por la puerta grande de la historia del deporte español con seis medallas en los europeos de Berlín. Si escarbamos, seguro que encontramos más similitudes entre estas dos mujeres que la de compartir portada, aunque la alemana se lleve la mayor parte del protagonismo.

Les une, seguro, una tenacidad y una capacidad de trabajo y de constancia ejemplares. Pero después de los regueros de tinta que ha dado de sí el encuentro de la jefa europea con Mariano Rajoy, permítanme que le dedique estas líneas a la deportista.

Su meta es ser campeona olímpica y, después de ver la proeza de conseguir dos medallas en menos de 20 minutos de intervalo es poco probable que no lo consiga.

En Berlín, en la carrera que tantos nadadores temen –los 200 mariposa-  Mireia ganó el oro, sólo 15 minutos después de ganar otra medalla en otra categoría, como si quisiera resaltar que siempre se puede ir un poco más lejos. Escuchándola en una entrevista radiofónica me quedo con una de sus frases “Queda mucho por mejorar”. Probablemente esa sea la clave -un espíritu de constante esfuerzo- para  comprender el alcance del éxito conseguido y el convencimiento de que con esta determinación el oro olímpico en Brasil 2016 será suyo.

Su mérito va más allá de su logro personal. España nunca ha brillado en este deporte y la nadadora de Badalona es la locomotora de un grupo de chicas que en conjunto sumaron 13 medallas en Berlín: Judit, Fati, Jessica, Melania, sus nombres tal vez  no dicen nada para la gran mayoría de nosotros. Sólo sabemos de ellas cundo se suben a un podio, pero detrás de la medalla está el trabajo cotidiano, el entrenamiento permanente y una vida dedicada a intentar ser las mejores.

El deporte femenino español lleva tiempo dando grandes alegrías: ahí están las campeonas de la natación sincronizada, la selección española de waterpolo o la de balonmano. De las 17 medallas obtenidas en las últimas olimpiadas 11 fueron femeninas.

¿Hacen falta más para conseguir más apoyo y mayor reconocimiento?

La visita de Ángela Merkel a Galicia tiene una enorme importancia desde el punto de vista político y de la promoción que hace de uno de los baluartes del turismo español, el Camino de Santiago, pero me parece más que merecido que la canciller ceda un poco de espacio a la que estos días también ha sido una grande a orillas del Rhin.

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