La canciller de Alemania, Angela Merkel, y el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, han finalizado en casi una hora un recorrido de unos 6 kilómetros por el Camino de Santiago.
Merkel ha iniciado con parte de la Ruta Jacobea su visita de dos días a Santiago, en la que además de ocio -esta tarde visitará también la zona vieja y mañana la Catedral-, le ocuparán temas económicos a tratar con el presidente en un encuentro el lunes. Una reunión que se centrará, eminentemente, en el próximo Consejo Europeo, que tendrá lugar el día 30 en Bruselas.
La mandataria alemana fue recibida esta tarde en Lavacolla tras aterrizar a las 17:30 horas por el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, acompañado por el jefe del Ejecutivo gallego, Alberto Núñez Feijóo. Estaba en el aeródromo compostelano, además, el delegado del Gobierno en Galicia, Samuel Juárez.
Tras el saludo, Merkel y Rajoy se desplazaron inmediatamente a O Pedrouzo, una pequeña aldea del municipio de O Pino, a escasos kilómetros del aeropuerto, para comenzar su Camino.
Desde allí, en una zona boscosa, con robles y eucaliptos, y de pistas forestales, ambos mandatarios han caminado hasta Lavacolla, en las inmediaciones del aeropuerto, ya en Compostela.
Angela Merkel vestía una camisa blanca a listas, pantalón del mismo color y deportivas marrones, y Mariano Rajoy eligió como atuendo un pantalón vaquero, una camisa a cuadros y zapatillas azules.
Al inicio de la ruta, ambos saludaron a los reporteros mientras caminaban a buen ritmo y charlaban de una manera distendida.
Los peregrinos que se encontraban en esta etapa preguntaron a los informadores qué ocurría, debido a la presencia de un dispositivo de seguridad, pese a que éste ha sido bastante disimulado, y, al conocer los caminantes la visita de Merkel y Rajoy, muchos se han mostrado sorprendidos.
Tras recorrer el tramo del Camino, Merkel llegó en coche al casco histórico, donde se ubica el Hostal dos Reis Católicos, en el que se alojará la delegación alemana, y fue saludada por el alcalde de la ciudad, Agustín Hernández.
Ha repartido saludos a su llegada, dado que unas trescientas personas la esperaban tras el cordón policial. La ciudad le ha dado la bienvenida entre vítores y aplausos, pero también con algún que otro abucheo.
Algunas personas han llegado a estrechar la mano de la canciller e incluso a intercambiar algunas palabras. Entre ellos, una pareja de peregrinos alemanes, de edad avanzada, que camina por esta conocida ruta de peregrinación desde abril y que, después de 2.650 kilómetros recorridos, ha esperado a esta jornada para poder saludar a la canciller.
Pero la dirigente ha escuchado también silbidos y algún reproche como menos recortes, fuera la troika o vete para Alemania, eso no es camino ni es nada, camino duro el de los españoles.
Las primeras horas de Angela Merkel en Santiago de Compostela concluyeron con una cena a la carta en un restaurante del casco histórico ubicado en la capital gallega, conocido por sus mariscos y carnes rojas.
De las imágenes que se han podido ver del recorrido, se ha podido escuchar al presidente del Gobierno español decir "exportamos", así como un "buenas tardes" con acento alemán.
Fotografía Diego Crespo (Presidencia)
