La plantilla teme el cierre de Novarue S.L., que dejaría a 70 trabajadores en la calle

Los trabajadores celebraron la asamblea frente a la nave de la empresa. ángeles pazos
photo_camera Los trabajadores celebraron la asamblea frente a la nave de la empresa. ángeles pazos

MARÍN. Los casi 70 trabajadores de las empresas Novarue S.L. y Aneix Inox, firmas auxiliares del naval del Puerto de Marín, temen perder sus puestos de trabajo después de que el propietario de ambas firmas les haya transmitido su intención de solicitar voluntariamente un concurso de acreedores.

La situación de los trabajadores se ve agravada por el hecho de que la plantilla lleva inmersa desde enero, y en algunos casos febrero, en un ERE de 90 días por trabajador por un período de ocho meses. Es decir, que llevan sin trabajar desde que comenzó el año.

Según explicaron miembros del Comité de empresa de las firmas, que pertenecen a los mismos dueños, la actual situación de Novarue S.L. y Aneix Inox comenzó a gestarse al contraer una deuda con el Ministerio de Hacienda de cerca de 160.000 euros, lo que motivó que se congelasen sus ingresos.

Una vez en esta situación, la empresa puso en marcha un Expediente de Regulación de Empleo (ERE) de 90 días (es decir, tres meses) por cada trabajador, a cumplir en un plazo máximo de ocho meses. Los primeros trabajadores que se acogieron al ERE lo hicieron el 13 de enero, mientras que el resto de la plantilla lo hizo en febrero, y así empezaron a descontarse los 90 días. Desde entonces, la plantilla, de cerca de 70 trabajadores, se encuentra parada.

El período de los 90 días finalizará, por tanto, en abril o mayo. En ese momento las empresas deberían llamar de nuevo a los trabajadores para que volviesen a sus puestos de trabajo; sin embargo, la medida que anunciaron a los delegados sindicales en un encuentro mantenido la semana pasada fue que iban a solicitar el concurso de acreedores de manera voluntaria. «Íano facer o venres pasado ou esta semana, pero non sabemos se ó final o fixeron», explica la plantilla.

Desde entonces, la plantilla ha tratado de negociar con los propietarios, sin éxito, y el miedo a que el concurso de acreedores desemboque en el despido de todos los trabajadores y el cierre de ambas firmas del Puerto marinense es una realidad.

El Comité de empresa celebró ayer una asamblea ante la nave portuaria en la que trabajan, a la que asistieron cerca de medio centenar de los empleados y que contó con representación de los sindicatos CC OO, UGT y CIG.

Por el momento, el Comité intentará reunirse hoy con la dirección de la empresa para saber si ya se ha solicitado el concurso y «ver a viabilidade da mesma», tal como manifestó un miembro del comité. El silencio de las empresas con la plantilla es total. «Non sabemos nada», se lamenta un trabajador.

Si bien el concurso de acreedores sirve para refinanciar la deuda contraída por la firma y permite asegurar el pago de nóminas adeudadas a los trabajadores, el Comité de empresa teme que se trate de una medida para echar el cierre «e en dous meses esteamos todos fóra». Es por esto que los trabajadores recalcan que solo disponen de lo que queda de febrero y el mes de marzo para negociar, ya que su ERE de 90 días finaliza en abril y, por tanto, en ese mes deberían retomar el trabajo.

Auxiliar naval

Más de 30 años de actividad

Los trabajadores reflexionaron ayer a las puertas de la nave que aloja a Montajes Novarue S.L. y Aner Inox en el Puerto de Marín sobre la actual situación de dos firmas que llevan funcionando desde hace más de 30 años.

«Facemos soldadura e calderería, sobre todo», apunta un trabajador.

Ambas firmas son auxiliares del sector naval y han trabajado para astilleros como Vulcano, Metalsis, Barreras y Factoría Naval. «En toda a ría de Vigo», apunta otro profesional.

A pesar de la crisis, los trabajadores aseguran que hay trabajo, aunque sea poco, y por ello no renuncian a la idea de analizar cualquier posibilidad de viabilidad económica de ambas firmas que les permita seguir con su trabajo.

De lo contrario, si los temores del comité de empresa se confirman y la auxiliar naval echa el cierre tras intentar refinanciar su deuda, casi 70 empleados perderían su trabajo.

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