La Xunta licitará la reforma de su antigua delegación

El edificio, de ocho plantas y más de 5.000 metros cuadrados, está situado en la céntrica calle Benito Corbal
Presentación del proyecto de reforma de la vieja sede de Benito Corbal
photo_camera Presentación del proyecto de reforma de la vieja sede de Benito Corbal

La Xunta de Galicia prevé licitar esta semana las obras de rehabilitación de su antigua delegación en Pontevedra por 5,1 millones de euros, según ha anunciado este martes el vicepresidente del gobierno gallego, Alfonso Rueda.

El edificio, de ocho plantas y más de 5.000 metros cuadrados, está situado en la céntrica calle Benito Corbal y se convertirá, según ha destacado Rueda en la presentación del proyecto, en un espacio "moderno, cómodo, accesible y versátil para todos sus usuarios". Las obras comenzarán a finales de este año y la Xunta espera que estén finalizadas en marzo de 2019.

En las tres primeras plantas -el semisótano y el primer y segundo piso- se situarán las oficinas de empleo de la Xunta, que en la actualidad están en dos locales alquilados en la ciudad, y que se concentrarán en un único espacio para facilitar la prestación del servicio al ciudadano. Este traslado, además, permitirá a la Xunta ahorrar 165.000 euros anuales en alquileres.

El gobierno gallego pondrá a disposición las plantas tercera y cuarta a disposición de entidades y asociaciones de interés social y sanitario, para que cuenten con un espacio en el que poder situar sus oficinas y locales y que, según Rueda, tendrán acceso independiente desde la calle.

Las cuatro plantas restantes -de la quinta a la octava- estarán a disposición de la Universidad de Vigo para que instale allí los servicios y proyectos que decida la institución académica.

Todo el edificio será "eficiente" desde el punto de vista energético y, entre otras cuestiones, tendrá calderas de biomasa para la calefacción, una instalación solar fotovoltaica para generar electricidad, bombas de calor para la refrigeración o un avanzado nivel de aislamiento térmico.

La Xunta, el Ayuntamiento y la Universidad de Vigo, al tiempo que avanzan las obras de rehabilitación, trabajarán conjuntamente en los usos que tendrá el inmueble y elegirán a los colectivos y asociaciones que ocuparán los locales disponibles para usos sociales.

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