Lamprea 'forever' en Pontecesures

Las lampreas del río Ulla siguen teniendo más empuje que la crisis y ayer quedó demostrado con una nueva edición de la fiesta gastronómica que, según los organizadores, ''estivo á altura doutros anos''.

De hecho, tal y como precisó Luis Sabariz, a las siete de la tarde se llevaban servidos 860 platos, entre pinchos y raciones; y la cifra aumentó todavía más en la sesión vespertina, para la que la organización tenía preparadas ''outras cincuenta lampreas máis'', de las que los comensales dieron buena cuenta tanto en empanada como en su tradicional preparación 'á bordelesa'.

Para los paladares que no se conformaron con estos manjares, también hubo puestos de pulpo y churrasco, así como las 'rosquilleiras', imprescindibles en cualquier verbena gallega que se precie. La multitud empezó a llenar el recinto de la fiesta desde las doce del mediodía, cuando se celebró la recepción de las autoridades en la Casa Consistorial (en un acto presidido por la alcaldesa Maribel Castro); aunque la hora punta fue la del pregón, que este año corrió a cargo del popular humorista y actor Carlos Blanco.

Como no podía ser de otro modo, el artista arousano optó por el humor y por un pregón desenfadado para animar a un público que ya de por sí tenías ganas de fiesta y que aplaudió su intervención. La música y el baile los pusieron los grupos Algueirada y Xarandeira, así como la charanga Santiaguiño. El acuario con lampreas vivas también atrajo a los curiosos y asustó a más de un niño.

Comentarios