VILANOVA. A punto de cumplirse un cuarto de siglo desde la intervención judicial que supuso el fin de la Conservera Charpo, uno de los emblemas del clan de Los Charlines de Vilanova, sus setenta trabajadoras siguen luchando para cobrar la deuda que quedó pendiente.
Ayer se celebró una vista en el Xulgado do Social número 3 de Pontevedra, en la que llegaron a un acuerdo con los liquidadores concursales por el que la semana próxima recibirán 300.000 euros en concepto de intereses por los atrasos derivados de la demora.
Sin embargo, esta cantidad no es la que reclaman. Hacienda mantiene que es medio millón, mientras que las operarias piden más de uno. Como esta diferencia dio lugar a la interposición de un recurso por parte de las trabajadoras, que está pendiente de resolución, esperan recibir la cantidad restante mientras esta no se produzca.
Además de reclamar el pago del dinero que se les adeuda, también aprovecharon la comparecencia en sede judicial para hacer constar ante los representantes del Ministerio de Hacienda su solicitud de que les sean embargadas a los Charlines propiedades en Madrid y O Grove.
Aunque la deuda de las indemnizaciones fue abonada en su totalidad, Hacienda todavía les adeuda los intereses de demora que se generaron durante una espera de 24 años. Una portavoz de las trabajadoras lamentó que trate de que parezca ante la opinión públicas que quieren aprovecharse, cuando reclaman lo que consideran que le corresponde y denunció que ellas son las perjudicadas por un retraso tan prolongado.
El primer ingreso se produjo tras la subasta de la depuradora Sochar, en A Illa, por 800.000 euros, en 2008. El segundo tuvo lugar a finales de enero de 2011, de 470.000, cantidad que se reunió por la venta de bienes de antiguas sociedades en otra proceso subasta. El ultimo pago, de 300.000 euros, tuvo lugar a comienzos del año 2012.
