Tres puestos de promoción interna y otros tres de promoción libre. Esta es la oferta laboral que el Concello de Poio tiene previsto crear con cargo al Presupuesto municipal de 2015 y cuyo anuncio se publicó en el Diario Oficial de Galicia del pasado día 9 de diciembre. En los correspondientes al primer bloque, la Administración local renovará su plantilla de personal fucionario con un encargado general de personal de oficios, un ingeniero técnico y un oficial de primera para el puesto de fontanero. En los puestos interiones se promocionará a un encargado de almacén, a un oficial de jardinería y a un conductor.
La oferta de empleo público se realiza cumpliendo las estrictas normas por las que se rige el Ayuntamiento poiense desde la última reforma que ha sufrido su reglamento y en concordancia con las medidas para hacer frente a la crisis económica. A este respecto, cabe recordar que la nueva contratación no está permitida, salvo en casos como el de este concello, "cumprindo unha porcentaxe concreta de renovación sobre o total, que creo que non debe sobrepasar o dez por cento da plantilla existente e cunhas normas moi estritas", relató el alcalde, Luciano Sobral.
El caso es que, aún en época de vacas flacas, el Concello necesita más manos para poder atender a los vecinos, sobre todo porque en los últimos años se han jubilado una gran cantidad de trabajadores. «No ámbito administrativo e no Consistorio o persoal é máis novo, pero no de operarios e almacén a cantidade de xubilacóns é moi significativa», apuntó el regidor del Bloque Nacionalista Galego, que sostiene que en los últimos años se han jubilado, al menos, cinco de las limpiadoras de la plantilla municipal.
Lo mismo ha pasado con el fontanero. Hace unos meses que dejó su puesto y el Concello está, en estos momentos, sin un oficial en plantilla que pueda asumir las tareas de fontanería y calderería, según indicó el regidor. Por otra parte, Sobral indica que los tres jefes de operarios del Concello están o retirados o a punto de retirarse. «Ata o de agora había xefe de obras, xefe de almacén e xefe de servizo», relata.
La intención es contratar al nuevo responsable de obras y, probablemente, la de unir las funciones de los otros dos puestos a medida que vayan retirándose los responsables de los mismos, al menos, como medida provisional. La prohibición de consolidar empleos expedida a los ayuntamientos se puede compensar, en circunstancias normales, con la contratación eventual que permiten los planes de la Deputación y de la Administración central, pero, en casos como el de Poio, en donde, según los cálculos del alcalde, se ha jubilado más del 10% de la plantilla, «levamos como 15 retirados e é moi complicado poder manter todos os servizos con este sistema de reposición de persoal».
Por último, el regidor indicó que, además de proveer estos puestos, el Concello pretende, en una próxima convocatoria, cubrir algunos más, como los de conductores, «porque estamos quedando tamén sen eles, a medida que se van retirando».
«No ámbito administrativo o persoal é máis novo, pero no de operarios e almacén a cantidade de xubilacións é significativa»
