Lores confía en que la sequía revierta y no sea necesario cerrar el grifo del agua al sector industrial

El alcalde de Pontevedra, Miguel Anxo Fernández Lores, confía en que la sequía revierta y no sea necesario cerrar el grifo a la industria. "Espero que non haxa que tomar medidas de carácter drástico", dijo el regidor nacionalista, que recordó que si es necesario llevar a cabo políticas de ahorro, la prioridad será el consumo humano. "É obvio que a auga doméstica ten preferencia sobre a industrial. En todo caso, é Augas de Galicia a que ten que tomar medidas neste asunto. Eu espero que non sexa necesario chegar a esta situación", manifestó.

Lores afirmó que, en caso de que haya que tomar cartas en el asunto, Pontevedra está preparada para hacerlo. "Non choveu que non escampara", bromeó.

El alcalde se mostró preocupado por la falta de precipitaciones y por la sequía en fuentes y acuíferos tanto en el municipio como en el resto de la comarca. "Temos a reserva do Pontillón", dijo en referencia al embalse de Verducido, que está casi lleno y que cuenta con autonomía suficiente como para abastecer durante 42 días a Pontevedra, Marín, Poio, Sanxenxo, Bueu y el polígono de A Reigosa, en Ponte Caldelas.

A pesar de "esta mensaxe de tranquilidade", el máximo representante del Concello instó a la ciudadanía a utilizar el agua de forma racional, tanto ahora como durante el resto del año.

Sobre los efectos de la sequía en la cuenca del Lérez hablará la Xunta el próximo lunes con los concellos de la ría, a los que ha convocado a una reunión para analizar de la situación de "alerta" sobre que este martes declaró oficialmente ante el comité permanente del consejo rector de Augas de Galicia.

LAS CARTAS. Fuentes de la Consellería de Medio Ambiente confirmaron que se han enviado cartas a los ayuntamientos del área del citado río para que completen toda la información relativa a su situación, tanto de uso como de consumo de agua.

El departamento autonómico recordó que, en la actualidad, el abastecimiento de agua para la vida diaria no presenta "ningún problema", pero advierte de la importancia de "no malgastar la que queda".

A la cita con el Gobierno gallego —que se ha pospuesto hasta la semana que viene— están convocados Pontevedra, Marín , Poio, Sanxenxo, Bueu, Cotobade, Campo Lameiro, Cerdedo-Cotobade y Forcarei. La mayor parte de ellos disponen ya de planes de choque para combatir la falta de lluvias.

Algunas de estas medidas pasarían por evitar el riego de jardines y zonas verdes y el baldeo de calles por parte de los servicios de limpieza. La hipotética limitación del agua industrial afectaría en mayor medida a empresas como Ence.

Medio Ambiente aseguró que las propuestas para ahorrar agua se harán a la carta para cada municipio. "Van a ser medidas individuales para dar respuesta a un problema en concreto", ratificaron responsables de la Consellería que dirige Beatriz Mato.