El sector cefalopodero gallego ha planteado esta mañana a la conselleira de Medio Rural y del Mar, Rosa Quintana, acudir a Bruselas para intentar salvar los pocos barcos que quedan de esta flota y defender que puedan faenar a partir de ahora en el caladero marroquí con unas mínimas garantías.
Integrantes del sector cefalopodero que faenaban en Mauritania hasta fechas recientes han mantenido esta mañana en Santiago una reunión con Quintana. Entre otros, al encuentro asistieron el responsable de CIG-Mar, Xabier Aboi; tres representantes de las empresas y cuatro tripulantes de la flota cefalopodera.
"Hay que ir a Bruselas, ya que no lo hace Madrid", dijo Aboi al término de la reunión.
Dijo que el reciente viaje a Marruecos del Rey y de varios ministros y empresarios "abre la posibilidad de que 5 barcos de esta flota vayan allí, pero a una zona en la cual nunca se pescó y en la que sólo tienen derecho a pescar a partir de 200 metros de profundidad, donde no hay ni la posibilidad de coger un kilo de pulpo o un kilo de marisco. Entonces, ¿a qué vamos?", se quejó.
"Nos vamos a situar a finales de septiembre-octubre con poco más de la mitad de la flota", explicó el dirigente de CIG-Mar, que recordó que "de 24 barcos que quedaban, 7 ya están desguazados, y hay otros 5 ó 6 barcos que quieren desguazar, y no hay caladero para ellos", dijo.
Aboi indicó que la reunión celebrada esta mañana en la Consellería de Medio Rural y Mar "fue muy tensa" en los primeros momentos.
"Ya no estamos en el momento de decir lo que hizo cada uno, lo que pedimos es que tal como está la situación no hay caladeros para estos barcos", indicó.
Este sindicalista explicó que el planteamiento que el sector hizo a la Consellería es acudir a Bruselas, "porque lo único que nos queda es preparar la votación en el Parlamento Europeo, y para ello hay que ir allá, patearse el Parlamento y hablar con los eurodiputados", aseveró.
"Nosotros en Madrid se lo dijimos, y Madrid dijo que ellos iban a seguir el mismo ritmo. Nos ofrecimos a la Xunta a ir con ellos a Bruselas, y que era bueno que fueran también los portavoces de pesca de los grupos parlamentarios", destacó.
Para el dirigente de CIG-Mar, "es ridículo que una flota que llegó a ser de más de 250 barcos se vaya a quedar con 12 y no tener dónde colocarlos".
Además, Aboi expresó su contrariedad por el hecho de que las restricciones en el caladero marroquí serían "sólo para la flota gallega, el resto faena donde hay pesca. Ese es el problema de fondo, cinco barcos a malvivir", concluyó.
Por último, el responsable de CIG-Mar ha anunciado que el próximo día 30 de agosto el sector cefalopodero celebrará una manifestación en Marín.
