Los secretos del símbolo más emblemático de Noalla

Una recreación en 3D, proyectada este jueves en la Casa Forestal As Canteiras, desvela el aspecto que tenía el Pazo de Quintáns durante su época de esplendor
El acto sirvió para dar detalles sobre el Plan de Usos y Director para la rehabilitación del pazo
photo_camera El acto sirvió para dar detalles sobre el Plan de Usos y Director para la rehabilitación del pazo

La situación en la que se encuentra actualmente el Pazo de Quintáns, uno de los símbolos del patrimonio de la parroquia de Noalla, poco tiene que ver con el aspecto que presentaba en su época de mayor esplendor. Numerosos vecinos de la localidad tuvieron este jueves ocasión de conocer algunos de los detalles del inmueble que hoy en día resultan poco menos que irreconocibles debido a su deterioro.

La Casa Forestal As Canteiras fue el lugar elegido por el Gobierno municipal para exponer los detalles del Plan Director y de Usos para la rehabilitación de la antigua vivienda, que pasará a formar parte del Museo de Pontevedra y acogerá exposiciones sobre los yacimientos arqueológicos hallados en A Lanzada. A través de una recreación en 3D, los asistentes a la reunión pudieron disfrutar de una visión completa del Pazo de Quintáns en el momento de su construcción, acompañada de una explicación de la importancia histórica que en su momento tenía en el contexto comarcal. La investigación histórica, orientada principalmente hacia la localización de información sobre la familia propietaria del pazo en la mayor parte de su historia, el linaje de los Padín, se ha completado con el trabajo de campo para la valoración del interés artístico de la morada familiar, desde la arquitectura a los jardines pasando por las piezas heráldicas y los bienes muebles.

La exposición aportó varios detalles de interés sobre la estructura del inmueble y de los elementos ornamentales de sus jardines, como el hórreo o el cierre perimetral. Otro de los detalles aportados por el equipo técnico tiene que ver con la capilla, en la que sobresale la imagen en piedra de la Virgen de la Quinta Angustia, una pieza datable en el segundo tercio del siglo XVII. Además, entre las piezas de mobiliario conservadas en el interior de la casa, presentan interés artístico algunos muebles probablemente pertenecientes a las etapas finales en las que el pazo estuvo habitado, entre finales del siglo XIX a comienzos del XX. Entre ellos, destacan un mueble de recibidor, un cabecero y una estructura de cama de madera tallada, los herrajes historicistas en la puerta central de la terraza abierta al jardín, un llamador con forma de mano en la misma puerta central de la terraza abierta al jardín, una cocina de hierro tipo Bilbaína, un mueble aparador con loza, empotrado en pared, una mecedora de madera curvada y mimbre de finales del siglo XIX y una estufa de fundición de finales del siglo XIX.

Cabe recordar que el Concello aspira a que el Pazo Quintáns sea declarado Bien de Interés Cultural (BIC), a fin de poder optar a subvenciones estatales para acometer su rehabilitación.

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