VILANOVA. Los trabajadores despedidos de la residencia Valle-Inclán, de Vilanova, enviaron hoy un mensaje a la Consellería de Traballo e Benestar, solicitándole que les exponga cual es la situación del geriátrico y las medidas que adoptará. Este colectivo hizo pública su demanda por medio de una marcha.
Los afectados contaron con el respaldo de los delegados de los sindicatos CIG, que celebró previamente una jornada de trabajo en la casa de cultura de O Esteiro, en Vilanova, CC OO y UGT.
La marcha comenzó a frente a la fachada de la Casa Consistorial, donde reclamaron el apoyo de su alcalde, Gonzalo Durán, para finalizar en As Sinas, delante de la residencia.
La secretaria del comité de empresa, Carmen Santos, denunció que 39 trabajadores fueron despedidos «por reclamar os nosos dereitos», después de haber sufrido «unha persecución constante por parte da dirección». Ante la negativa tajante de la empresa de negociar, se vieron abocados a movilizarse, agregó.
Denuncia. Fue entonces cuando denunciaron la creación de una empresa de jardinería, Nurtime, en la que figuran todos los trabajadores que fueron contratados para ocupar sus puestos, mientras que en Viajes Silgar, firma responsable de la gestión de la residencia, a la que pertenecían todos los despedidos, solo queda uno.
Los despedidos instaron a Beatriz Mato a que actúe ante lo que consideran una irregularidad, porque 131 de las 160 plazas de la residencia Valle-Inclán están concertadas con su Consellería. «É un problema laboral e social», subrayó Carmen Santos.
Los manifestantes anunciaron que se desplazarán hasta Santiago si no reciben noticias de la Consellería de Traballo e Benestar.
