Activistas de varias organizaciones en defensa de los derechos de este colectivo han pedido a los representantes políticos una ley de igualdad LGTBI. Lo han hecho ante una multitud que se ha congregado en la madrileña plaza de Colón, al término de la manifestación de la marcha del World Pride 2017.
Líderes políticos como la presidenta de la Comunidad de Madrid, Cristina Cifuentes; la alcaldesa de la capital, Manuela Carmena; el secretario general de Podemos, Pablo Iglesias; el líder de Ciudadanos, Albert Rivera; la vicesecretaria de Comunicación del PP, Andrea Levi; y la responsable de Movimientos del PSOE, Mónica Silvana, entre otros, han presenciado las reivindicaciones.
Tanto Manuela Carmena como Cristina Cifuentes han querido dedicar unas palabras al colectivo
Todos ellos, que han participado en la manifestación previa, han sido invitados "con el compromiso" que de apoyen la aprobación de una "ley contra la discriminación y la igualdad social", según ha dicho uno de los convocantes.
En la lectura del manifiesto, los activistas han solicitado la aprobación de esa ley que persiga la consecución de una sociedad igualitaria y sin discriminación de ningún tipo. También han recalcado la necesidad de que se garantice el derecho a refugio y asilo para las personas LGTBI que son perseguidas en sus países de origen.
PERSECUCIÓN. Aunque han agradecido que Madrid se haya convertido en un "referente mundial de pluralismo y respeto", se han recordado las miles de personas LGTBI asesinadas en los últimos años en países como México o Brasil, o la situación que vive este colectivo en Chechenia, donde sufre una "intolerable persecución".
Por ello, han invitado a todos aquellos que se han congregado esta tarde en la plaza de Colón a inmortalizar el momento con sus teléfonos móviles y subir las fotos a sus redes sociales geolocalizándolas en la Plaza Roja de Moscú para dar ánimo a las personas perseguidas en ese país por su orientación sexual.
Carmena, que ha leído algunos versos en homenaje al poeta Federico García Lorca, ha evidenciado su emoción por que Madrid sea la capital del Orgullo mundial. Pero también ha recordado la necesidad de ayudar a aquellos que todavía son perseguidos por su orientación sexual, y ha recalcado que el derecho se ha de cambiar "cuando la vida lo exige".
Los activistas también han pedido a las autoridades nacionales e internacionales que "exijan que los derechos humanos de las personas LGTBI sean respetados" y que se supriman los castigos penales al colectivo que aún perdura en torno a 80 países.
