Madrid, un nauseabundo 'campo de batalla'

Las calles de Madrid siguen sucias y llenas de desperdicios en la octava jornada de huelga indefinida en el servicio de limpieza viaria de Madrid, que se ha cerrado sin expectativas de que se produzca un acuerdo entre la patronal del sector y los sindicatos para poner fin a los paros.

Durante las últimas horas el debate y los hechos al conflicto se han visto envueltos por  una terminología más apropiada de un conflicto armado que de una reivindicación de condiciones laborales. La especulación con intervención del Ejército, detenidos, "rehenes" y transfusiones de sangre son también algunos de los ingredientes de esta huelga.

Todas las administraciones han asegurado que la basura que se acumula en las calles de la ciudad no es todavía un problema de salud pública, entre ellas la ministra de Sanidad, Ana Mato.

Desde el Ejecutivo autonómico madrileño, el consejero de Sanidad, Javier Fernández-Lasquetty, ha señalado que la competencia sobre la vigilancia de los niveles de salubridad es municipal y se ha mostrado "confiado en el seguimiento" que está realizando el consistorio.

Lasquetty ha indicado que es el Ayuntamiento de Madrid el que, si en un momento dado considera que se ha llegado a lo que legalmente y técnicamente se considera peligro para la salud pública, debe proponer las medidas "que crea necesarias".

Los problemas sanitarios a raíz de las ocho jornadas de huelga se han descartado por el momento, pero la Mesa de Turismo, que agrupa a una treintena de las principales empresas turísticas de España, ha advertido de que la huelga está causando un grave daño a la imagen turística de la capital.

En este sentido, la alcaldesa de Madrid, Ana Botella, ha asegurado que las críticas de un periódico alemán sobre el daño que este conflicto puede causar a la imagen de Madrid no responden "a la realidad".

En la jornada de hoy se han producido tres nuevas detenciones relacionadas con el paro indefinido, lo que eleva a dieciséis las registradas en las ocho primeras jornadas de huelga, en las que además se han producido 50 detenciones.

Todos los detenidos se encuentran en libertad con cargos, según fuentes de la Delegación del Gobierno.

A este respecto, el presidente de la Comunidad, Ignacio González, ha reclamado un "esfuerzo" a las empresas para poner fin a la huelga indefinida y ha pedido mayor "contundencia" a las fuerzas de seguridad contra los actos vandálicos para ensuciar las calles.

Por su parte, Botella, ha recalcado que "los madrileños no pueden seguir siendo rehenes de una huelga en la que se están pudiendo cumplir los servicios mínimos escoltados por la Policía Municipal y ayudados por la Policía Nacional".

Según el Ayuntamiento, el 100 % del personal se ha presentado esta mañana a su puesto de trabajo, pero solo ha podido salir en algún momento del día un 73 % de los servicios mínimos y la mayoría ha tenido dificultades.

Las empresas adjudicatarias del servicio de limpieza y mantenimiento de jardines del Ayuntamiento de Madrid han realizado hoy una nueva oferta a los trabajadores, en la que ofrecen a la plantilla "mantener" los salarios de 2007 más la antigüedad.

Con esta nueva propuesta, que sucede a la de reducir de 1.134 a 625 los despidos recogidos en el ERE conocida ayer y rechazada por los sindicatos, las empresas aseguran que se mantiene el "poder adquisitivo" de los empleados desde el comienzo de la crisis.

El Ayuntamiento de Madrid ha descartado solicitar la intervención del Ejército para paliar los efectos de la huelga -una propuesta lanzada en internet y que ha conseguido miles de adhesiones-, ha apuntado el delegado de Medio Ambiente y Movilidad, Diego Sanjuanbenito.

Como gesto de protesta, noventa trabajadores del servicio de limpieza y mantenimiento de jardines han acudido al Centro de Transfusión de Valdebernardo para donar sangre.

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