Marcial Dorado Baúlde sostuvo ayer, ante el tribunal de la Audiencia Nacional que lo juzga por su presunta implicación en la ‘Operación Retro’, que desconocía el destino de la embarcación fabricada en un astillero de su propiedad y vendidaa Roberto Leiro.
Leiro es uno de los presuntos cabecillas de un operativo articulado por dos grupos de narcotraficantes para introducir en Galicia un alijo de 6.640 kilos de cocaína a través de las costas gallegas que se encontraba alijado en el barco ‘South Sea’.
En la segunda sesión del juicio, que se celebra Madrid, el isleño expuso que no llegó a hablar con Leiro y mantuvo que si hubiese conocido la finalidad a la que iba a ser destinada la embarcación, denominada ‘Nautillus’, no hubiera utilizado las oficinas de su empresa ni sus teléfonos para cerrar la venta, pactada en 50.000dólares.
Dorado aseguró al fiscal que no tiene relación alguna la circunstancia de que poco después de la venta hubiese dado de baja la empresa utilizada para realizar el cobro, denominada ‘Bio Research Marine Inc’ y domiciliada en Belice, con la intención de desvincularse de una operación de la que, según la acusación tenía plena constancia.
Estas afirmaciones contrastan con las que había realizado cuando fue detenido en 2003 por ordende José Antonio Vázquez Taín. Entonces,había negado ante el juez instructor la venta.
El arousano trató de justificar ayer la contradicción en la que incurrió aludiendo a la presión derivada de su arresto y la situación que supuso encontrarse en una sala ante tres personas cuya identidad dijo desconocer. «Al llegar al Juzgado me encontré con el juez y con tres señores que no sabía quienes eran; luego me enteré que eran aduaneros y, en esemomento, no sabía qué decir», respondió.
En el expediente de este excontrabandista de tabaco figura la condena a 2,5 años de prisión por cohecho. Los pasos de Marcial Dorado Baúlde habían sido seguidos por la Interpol, en la década de los 90, pero los agentes no lograron reunir pruebas que les permitieran implicarlo en alguna operación relacionada con el tráfico de drogas, por lo que se trata de la primera ocasión en la que se encuentra ante una acusación en firme.
En sus conclusiones provisionales,el fiscal solicitó 17 años de prisión para el isleño.
