La carretera PO-308 cuenta con un macabro historial, especialmente en lo que a la historia reciente se refire. Y es que más de media docena de personas han perdido la vida en este vial de titularidad autonómica, tanto en Poio como en Sanxenxo, si bien la mayoría de los siniestros más graves se registraron en el término municipal vecino a Pontevedra.
Aunque también se produjeron accidentes en los que perdieron la vida ocupantes de vehículos (el más grave tuvo lugar en 2007, en un choque entre un camión y un turismo, en el que murieron dos niños y su madre), la mayoría de las víctimas fueron peatones o ciclistas. En la retina de muchos amantes del deporte de las dos ruedas permanece aún el accidente que sesgó la vida del joven Jorge Vázquez Valcárcel en Covelo (Samieira), el pasado mes de abril, cuando fue arrollado por un turismo que estaba a punto de realizar un cambio de sentido en una zona no habilitada para esta maniobra.
En 2014, Ana María Gómez, vecina de Raxó, moría atropellada a las puertas de su casa. Pocos meses después, una octogenaria era también golpeada fatídicamente por un turismo en San Xoán.
El domingo, en Lourido, lejos de esta carretera, se produjo una salida de vía en la que no hubo que lamentar heridos.
Más de media docena de víctimas mortales en la PO-308 en la última década
La mayoría de los fallecidos en accidentes registrados en la carretera autonómica eran peatones o ciclistas
