Mantener cuidados las zonas verdes y los espacios naturales del municipio y convertir esta exigencia en una alternativa para promover la integración social y laboral del colectivo de personas con autismo y discapacidad intelectual es una fórmula que aplica desde hace dos años el Concello de Ribadumia, y por la que también seguirá apostando este ejercicio, para lo que renovó el convenio con la asociación Baión Asociación Tratamiento del Autismo (Bata).
Desde hoy, y hasta que finalice el año, tres personas participarán en las labores de mantenimiento, complementando el trabajo que realiza el personal del Concello, siempre bajo la tutela de un monitor. El inicio de su actividad comenzó en el paseo fluvial de Pontearnelas, finalizará en el mes de diciembre, y se retrasó algo con respecto a años anteriores debido a la lluvia.
Impacto social
Ignacio Rey, responsable del Servicio de Empleo de Bata, subrayó el impacto social del convenio, «porque estaban desexando empezar e moi pendientes de se se lles renovaba o contrato ou non», expuso. «Para eles é moi importante porque demostran que son cidadáns activos, que poden participar e contribuír ao desenvolvemento social e económico e a mellora do medio ambiente», agregó.
Rey expresó su agradecimiento al Concello de Ribadumia, institución a la que dijo que no es necesario que Bata le exponga todos los años su proyecto para convencer a su alcaldesa, Salomé Peña, de que cuente con la asociación.
«Aposta por nós en tempos tan complicados económicamente e cree nos nosos proxectos», expuso Ignacio Rey en referencia a Salomé Peña una rueda de prensa celebrada en el Paseo Fluvial del Umia en Pontearnelas.
«Estamos moi contentos con eles», indicó la alcaldesa. La regidora justificó la inversión económica por su finalidad: cuidar los entornos naturales más atractivos del municipio y colaborar en la tarea de la integración.
Salomé Peña aprovechó el acto para realizar un llamamiento a otras administraciones públicas y empresas para que firmen convenios con la asociación Bata y sigan el ejemplo del Concello de Ribadumia.
