El grupo Monbus gestionará las 65 líneas de autobús licitadas por la Xunta para paliar la renuncia presentada por algunas de las empresas adjudicatarias a seguir adelante con el servicio. Al igual de lo que ha ocurrido en gran parte del territorio autonómico, llama la atención que, pese a las quejas presentadas inicialmente por las compañías, los itinerarios han quedado finalmente en manos de las sociedades 'insumisas' que ya tenían presencia en Pontevedra.
Todas empezarán a funcionar bajo el nuevo sistema a partir del día 8, en el marco de la primera fase del Plan de Transporte diseñado por la Consellería de Infraestruturas e Vivenda. Y en el caso del área pontevedresa, todas lo harán bajo el modelo de Ute (Unión Temporal de Empresas). Concretamente, las 65 líneas están divididas en cuatro contratos, que han sido ajdudicados a cuatro Ute en las que participan siete compañías.
Pontevedra-Marín
LA Ute Transportes La Unión-Autobuses de Pontevedra es la adjudicataria del contrato que contempla la conexión de Pontevedra con Marín y otros concellos circundantes, como Vilaboa, Marín y Poio. La previsión inicial es poner a rodar seis líneas, en las que, en un principio, no está contemplada la modalidad de transporte escolar. La Xunta lo considera como uno de los contratos más rentables. De hecho, de los gastos previstos inicialmente (1.047.269 euros), preveía que solo tendría que abonar a la firma 140.000 euros.
Otros diez contratos seguirán vigentes los próximos dos años, a la espera de la segunda fase del Plan de Transporte
Soutomaior-Pontevedra-Vigo
El ámbito de este contrato abarca once municipios entre Pontevedra y Tui. La adjudicataria ha sido la Ute formada por Transportes La Unión, Autos Arcade, Castromil, Empresa Monforte y La Hispano Igualadina, todas ellas empresas en las que Monbus tiene una importante participación o es propietaria. El proyecto contempla 19 líneas, de las que 16 serán compatibles con el transporte escolar para dar servicio al CEIP de A Lama, el CPI Manuel Padín Truiteiro (Soutomaior), el CEIP de Ponte Sampaio, el CEP de Riomaior (Vilaboa) y el IES de Ponte Caldelas. La Xunta calculó de entrada un gasto anual de 528.750 euros, de los que preveía recuperar 50.793 en la venta de billetes.
Pontevedra-Bueu-Cangas-Vigo
Otro de los contratos prevé dar servicio a siete municipios repartidos entre Pontevedra, la costa morracense y Vigo. La concesionaria es la UTE integrada por Transportes La Unión, Autobuses de Pontevedra, Autos Arcade, Empresa Viuda de J.Domínguez, Empresa Monforte, y La Hispano Igualadina. El anteproyecto propone la creación de 20 líneas, de las que 16 compaginarán el servicio con el transporte escolar para dar cobertura a los centros IES Gonzalo Torrente Ballester, el CPI do Toural de Vilaboa, el CEIP A Carballeira de Lourizán, o el CEIP de Seixo. La Administración autonómica calculó un gasto de 1.176.639 euros y unos ingresos por parte de los usuarios de 726.559 euros.
Pontevedra-O Grove
Otro de los contratos tiene por objetivo optimizar el transporte en el ámbito territorial integrado por Pontevedra, Poio, Marín, Meaño, Sanxenxo y O Grove. La propuesta parte del impulso de 20 líneas de autobús, de las que 16 serán compatibles con el transporte escolar, pudiendo ser utilizadas por los alumnos del IES de Sanxenxo, el IES de Poio, el IES de Vilalonga, el CEIP de Espedregada (Raxó) o el CEIP de Noalla-Telleiro. La adjudicataria ha sido la UTE formada por Transportes La Unión, Autobuses de Pontevedra, Autos Arcade, Empresa Monforte y La Hispano Igualadina.
La Xunta calculó en un principio que harían falta 19 autobuses y que los usuarios aportarán 585.905 euros de los 1.000.678 en los que fue valorado el contrato.
Al margen de estos contratos, también hay ejemplos de concesiones que continuarán intactas los próximos dos años. El listado oficial incluye un mínimo de diez contratos que seguirán vigentes en el área de Pontevedra y que favorecen la conexión de la ciudad con el resto de grandes urbes y ubicaciones específicas, como Castiñeiras, Cambeses o Avión.
