MADRID. La Comisión de Interior del Congreso dio ayer luz verde a la reforma de la Ley de Tráfico, que ahora pasará al Senado, y suavizó las multas por consumo de alcohol al volante, que, frente al proyecto inicial, solo serán de mil euros si la tasa duplica la permitida o si se es reincidente.
Así lo acordaron ‘in extremis’ el Partido Popular y CiU, por lo que frente a las multas que establecía el proyecto inicial, que incrementaba de los 500 euros actuales a 1.000 euros por dar positivo, en la nueva redacción solo se sancionará con esa cantidad máxima cuando se duplique la tasa permitida, es decir cuando se dé un gramo de alcohol por litro de sangre en los controles.
También será de 1.000 euros cuando el conductor se niegue a someterse a la prueba de alcoholemia o cuando sea reincidente, es decir, que haya sido multado por consumo de alcohol durante el año inmediatamente anterior a la sanción, según la enmienda transaccional pactada entre PP y CiU, que contó con el apoyo de todos los grupos a excepción del PSOE, que se abstuvo.
Precisamente, esos dos grupos también acordaron la semana pasada, en el trámite de ponencia, establecer en los 16 años la edad hasta la que será obligatorio el uso del casco de la bicicleta en ciudad, a pesar de que la intención inicial del Gobierno era imponerlo hasta los 18 años.
Son estas las dos novedades más importantes del proyecto de reforma de la Ley de Tráfico, que ahora pasará al Senado y cuya aprobación definitiva supondrá la puesta en marcha del nuevo Reglamento de Circulación, que no entrará en vigor hasta al menos marzo.
