PONTEVEDRA. «Métáforas poéticas sobre el paisaje gallego». Así define la artista Sofía Táboas la exposición que inauguró hoy en la Fundación Rac de Pontevedra bajo el título ‘Piedra Principio’ y que permanecerá abierta hasta principios de febrero.
Aunque es natural de México DF, Táboas vino hace un año a Galicia invitada por la Rac para hacer una residencia y «así desarrollar un proyecto relacionado con el paisaje de la zona», explica. «Dado que mi padre era de Ourense, decidí centrar mi investigación en esa provincia y, en concreto, en la ‘ruta dos bolos’, ubicada en la Serra de Pena Corneira». Desde ese momento, el paraje natural del Ribeiro ourensano se convirtió en el alma del proyecto. Para la artista mexicana la piedra es el material clave de la exposición, «porque sintetiza a la perfección el paisaje de Galicia», dice. No obstante, no es el único, «pues la producción textil se involucra en cada una de las piezas que he diseñado».
‘Piedra Principio’ contó con la colaboración de la diseñadora ourensana Purificación García, que donó toneladas de retales de telas y de pieles que las máquinas de su fábrica deshechan. Con los de piel, la artista dio vida a la obra por excelencia de la muestra y la primera con la que el público se encuentra al entrar en la Fundación. «El dibujo tridimensional que ofrece esta textura me ayudó a recrear el paisaje frondoso que vas esquivando cuando caminas por la ‘ruta dos bolos’».
Además, la artista y Purificación, que hoy estuvo en la inauguración, crearon juntas una joya bañada en oro que se completa con una pieza de granito gris y que se producirá en edición limitada.
Por su parte, Táboas incluyó en la muestra varias piedras de wolframio y estaño fusionadas con elementos como setas, una esponja o hilo de amarre de embutidos, lo que hace que las piezas se conviertan es una «bitácora sobre la experiencia que viví durante el recorrido de la ruta». Esto se completa con un vídeo.
Por último, ‘Piedra Principio’ cuenta con una colección de 30 planchas compuestas por cubos de retales cosidos, que fueron elaborados con la ayuda de los alumnos de la Escola de Deseño e Moda de Pontevedra. Los estudiantes trabajaron en este proyecto durante cuatro meses. «Algunas se encuentran ancladas al suelo con piedras que recogí en el camino durante mi infancia», describe. No obstante, en la exposición solo hay dos piezas, «porque las demás me las llevaré a México para mostrarlas allí». Según reconoce Táboas, «me inspiré en el cubo emblema de Purificación García para diseñarlas».
