Una nutrida representación de la flota del cerco ha protestado hoy ante las dependencias de la Xunta por la propuesta de reparto de las cuotas de jurel y caballa, al entender que Galicia saldría perjudicada respecto a otras comunidades del norte.
Los manifestantes, que llegaron a arrojar pescado a la sede de la Xunta, reclaman "un reparto justo" que, en lugar de asignarse individualmente en función de las capturas históricas de cada barco, se tenga en cuenta el número de tripulantes por embarcación.
Xabier Aboi, representante de la CIG-Mar, explicó a EFE que la protesta reivindica un reparto "justo para toda la flota, no en función de unos barcos trampeados y de no se sabe qué".
Su demanda es "tan simple como un reparto que permita trabajar a los barcos gallegos" e indicó que el 70 por ciento de la asignación se hará en función de capturas históricas, en lugar de tenerse en cuenta cada flota y sus tripulantes, criterios con los que consideró que saldría beneficiada la flota vasca.
"No se nos puede dejar a nosotros sin poder comer", dijo Aboi, que lamentó que la Xunta "no quiera" recibir al sector.
Durante la protesta, una representación de los congregados reclamó entrevistarse con la conselleira de Medio Rural y Mar, Rosa Quintana, mientras coreaba cánticos pidiendo su dimisión, aunque la representante autonómica no se encontraba en ese momento en las dependencias administrativas.
"La próxima semana habrá novedades", advirtió Aboi respecto a posibles nuevas movilizaciones del sector.
