El insólito acuerdo alcanzado un día antes por el PSOE y el PP de Vilagarcía de Arousa fue finalmente ratificado este jueves en un largo e intenso pleno, premitiendo así aprobar el funcionamiento del Concello a nivel de organización (reparto de áreas, salarios, dedicaciones...), tras unos tres meses en los que el gobierno en minoría del PSOE, con ocho ediles, estuvo prácticamente paralizado.
Finalmente, los siete concejales del PP sumaron sus votos a los socialistas para dar un respiro al regidor, Alberto Varela. Lo que ocurre es que no se trata de un cheque en blanco, sino que los populares logran una liberación que puede dividir en dos parciales; la vicepresidencia de la Fundación Fexdega y representación en organismos como Mancomunidade do Salnésy el Puerto de Vilagarcía. El PSOE también se comprometió a sacar adelante varios de los proyectos que tenía en marcha el anterior gobierno conservador.
Ambos partidos insistieron, ante las férreas críticas de otros grupos, que se trata de un acuerdo "puntual" y en ningún caso un pacto de gobierno.
