¿Por qué los deudores recurren a la Ley de Segunda Oportunidad?

La pandemia dispara el número de consultas legales sobre este mecanismo, cuyo principal beneficio es que permite la cancelación de una deuda de hasta cinco millones de euros

Segunda oportunidade

La Ley de la Segunda Oportunidad, desconocida hasta hace unos meses para el gran público, y la forma en la que ha calado en la sociedad ha sido una de las pocas notas positivas de la pandemia. Fruto de los beneficios que otorga a aquellos solicitantes que reúnen una serie de requisitos no excesivamente complejos, cada vez son más las personas que desean pasar página, cancelar sus deudas y empezar un nuevo capítulo de su vida desde cero.

Unos meses complejos

A nadie se le escapa que los últimos meses han sido muy duros para la economía de muchos particulares. El parón en seco que sufrió la actividad, el consecuente auge del comercio online -que ha llegado para quedarse en muchos hogares- y las restricciones sanitarias han supuesto un ciclón imposible de contrarrestar para un sinfín de autónomos, empresarios o particulares que han tenido que ver cómo su negocio o proyecto personal se iba a pique. Por no hablar de los ERTE o ERE que han roto por completo en otras tantas familias cualquier atisbo de estabilidad o cosa que se le parezca.

¿Entonces, qué? Pues cuando las facturas apremian y el dinero no llega, llega un punto que el déficit se convierte insoportable. Un mes, dos o tres se puede aguantar, pero cuando el pozo cada vez es más profundo y no hay forma de salir de los números rojos, vale más detenerse un segundo y tomar una decisión en frío aunque sea definitiva y definitoria, que emprender una huida hacia adelante que concluya en un callejón sin salida que agrave aún más la situación. 

La Ley de Segunda Oportunidad entra en juego

Generalmente, y como si de un patrón común se tratase, cuando estas personas se paran a buscar una solución para este problema, se terminan topando con la misma respuesta: Ley de la Segunda Oportunidad, una ley que permite cancelar una deuda considerable  siempre y cuando esta sea inferior a los cinco millones de euros

El letrado gallego Angel Andújar, especializado en este tipo de procedimientos en el despacho Segunda Oportunidad Galicia, explica que desde el inicio de la pandemia y en especial en los últimos meses "ha habido un claro aumento de consultas debido a la disminución de ingresos de los interesados", un aumento que atribuye a distintas causas, "bien por haber entrado en ERTE, o en otros casos por haber perdido directamente el empleo, o bien porque el proyecto empresarial o personal en el que estaban sumidos se ha visto frustrado".

De hecho, los solicitantes no dudan en reconocer que las deudas que han agravado su maltrecha situación se han producido "como consecuencia directa de la pandemia". Es más, "en el caso de los empresarios a los que anteriormente hacíamos referencia, el origen de sus deudas ha sido la caída de ingresos de sus negocios y por ende la imposibilidad de hacer frente a sus gastos y financiación". 

Es más, si se ahonda en la tipología del solicitante que desea acceder a la cancelación de sus deudas, Angel Andújar detecta un mayor número de casos en aquellos "empresarios inmersos en sectores relacionados con el ocio, la hostelería, el turismo y la restauración", a quienes considera los grandes perjudicados de esta crisis.

Escaso conocimiento

A pesar de los beneficios que puede reportar a aquel deudor que se vea con el agua al cuello y que no encuentre la forma de pasar página, el letrado reconoce que "todavía hay un escaso conocimiento de esta ley". No obstante, también nota que "ya empieza a funcionar el ‘boca a boca’, dado que la gente que se está acogiendo está obteniendo un resultado satisfactorio y sus experiencias y opiniones están sirviendo de ejemplo y aliciente a otras personas con la misma problemática, que quizá por desconocimiento de la ley no se atreven a dar el paso".

En cualquier caso, considera que "aún queda mucho camino por recorrer en el conocimiento popular del procedimiento de la Ley de la Segunda Oportunidad", es más, llega a reconocer que "incluso hay gente que lo descarta como una posible solución porque no le parece posible conseguir la exoneración (el perdón) de todas sus deudas".