POIO. La situación de la sede de Cespa en el municipio de Poio ha provocado quejas vecinales. El local utilizado por la concesionaria del servicio de recogida de basura está justo al lado de las oficinas de Aquagest y a muy poca distancia de varias viviendas, en el Camiño Os Lamoseiros.
Fueron precisamente los residentes en la zona los que criticaron las molestias que genera la actividad de la empresa en la zona.
Según indicaron, en el recinto "hay contenedores de basura ya usados y en mal estado, así como camiones que quedan aparcados incluso durante todo el día con desperdicios y que desprenden un olor insoportable".
Tal y como señaló una vecina, "en verano la situación es insufrible, porque el calor hace que huela todavía peor y en las casas de alrededor no podemos abrir las ventanas y tenemos que poner ambientadores".
Algún afectado ha presentado ya una reclamación ante el Concello de Poio, solicitándole que tome medidas para ponerle fin a esta situación. De hecho, la Policía Local ya ha estado en el lugar para constatar los hechos.
El alcalde, Luciano Sobral, dijo anteayer ser conocedor de estas quejas y precisó que el Gobierno local le ha requerido a Cespa que sanee sus instalaciones en Poio. En palabras del regidor, "xa falamos con responsables da empresa e comprometéronse a que hoxe, sen falta, ían acondicionar a parcela, retirar os colectores en mal estado e non deixar máis alí os camións con lixo". Según añadió, el contrato entre el Ayuntamiento y Cespa ya finalizó su vigencia inicial y actualmente está prorrogado. No obstante, la intención de la Administración local es convocar un nuevo concurso para adjudicar de nuevo el servicio. Tal y como añadió, una de las condiciones será que la concesionaria tenga unas instalaciones que no generen molestias a ninguna vivienda.
