La parroquia marinense de Santomé está siendo objeto de un lavado de cara de aquellas zonas más descuidadas, razón por la cual quedaban inutilizadas, siendo un patrimonio natural que el vecindario no podía disfrutar. Por eso la Xunta de Galicia tiene esparcidos por la zona diferentes puntos con carteles que versan Espazo Natural Rexenerado. Significa que en esa parcela ya se han llevado a cabo actuaciones de limpieza, que han permitido convertir escombreras en verdaderos espacios verdes.
La parroquia de Seixo ha notado esa humanización fundamentalmente en las inmediaciones del campo de fútbol y en una carballeira, que se encontraba en situación de abandono y que ahora se ha transformado en un lugar de disfrute en el que poder pasear, comer al aire libre o descansar.
En la parroquia se han regenerado las inmediaciones del campo de fútbol y una carballeira que estaba abandonada
Cada espacio natural que se regenera pretende ser un ejemplo de cómo el maltrato y la acumulación de basura y residuos degradan los más bonitos rincones de las parroquias, condenándolos a convertirse en papeleras a cielo abierto.
Al iniciar la regeneración de una zona verde, lo primero que se hace es limpiar, tanto en lo que se refiere a naturaleza muerta como residuos generados por la actividad humana, como plásticos, papeles, colillas... Una vez limpio, el terreno está listo para la plantación de un césped, que permite crear una imagen renovada de la zona y aumentar la concienciación comparando el antes y el después.
