La acreditación de calidad que significa estar en posesión del certificado UNE-ISO/ITC 17065 no está al alcance de cualquiera. El presidente de la Xunta de Galicia, Alberto Núñez Feijóo, lo advirtió este martes en Meis, en el acto de entrega de los distintivos que fueron entregados a los responsables de 170 bodegas de la Denominación de Orixe Rías Baixas.
"É unha meta á que non chegan todos", dijo Núñez Feijóo después de recordar que quienes lo lograron tuvieron que realizar un esfuerzo para adaptar su producción a unas exigencias que permiten que el vino pueda ser consumido con total confianza a miles de kilómetros del lugar donde se produce y elabora.
Su intervención tuvo como escenario el auditorio del centro multiusos de O Mosteiro, después de que los representantes de las bodegas se subiesen a su escenario, en 17 tandas, para recibir los diplomas y posar para la foto.
"O Consello Regulador, as adegas, o Goberno autonómico e os membros do grupo de Enxeñaría de Organización da Universidade de Vigo fixemos xuntos ese esforzo intelixente", dijo después de referirse al incremento del presupuesto destinado a innovación en el mundo rural, a las investigaciones llevadas a cabo en centros como la Estación de Viticultura e Enoloxía de Galicia para profundizar en el estudio y caracterización genética de especies y cepas, y al aumento de ayudas a los consellos reguladores, "especialmente, a partida dedicada ao control de calidade, nun 50%", precisó Núñez Feijóo.
El presidente de Rías Baixas, Juan Gil de Araújo, subrayó que el de este martes "fue un momento de gran relevancia" para la D.O. y dijo que "este acto pasará a los anales de la historia como un hito", además de subrayar el protagonismo de los viticultores.
"Culminamos la primera parte de una travesía que empezamos en el año 2010, fecha en la que hicimos historia al convertirnos en la primera Denominación de Origen vitivinícola gallega, y una de las primeras de España, en recibir la acreditación según los criterios de la norma UNE-17065", recordó Gil de Araújo.
Ignacio Pina, director técnico de la empresa Enac, subrayó que para conseguir el distintivo, los bodegueros tuvieron que realizar un notable esfuerzo para adaptarse a unas nuevas exigencias, y agregó que la recompensa es saber que el sello que lograron está reconocido en 70 países.
"Es una certificación que genera confianza", subrayó el director de Aenor en Galicia, Martín Pita, antes de vaticinar que antes o después todos los productos, empresas y servicios tendrán que disponer de algún tipo de certificación para ser viables en el mercado.
"É un exemplo do mellor que temos", dijo la presidenta de la Deputación, Carmela Silva. "Detrás de cada proxecto de éxito hai moitos esforzos, riscos e sacrificios", agregó.
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Rías Baixas certifica la calidad de sus vinos
Los responsables de 170 bodegas reciben el certificado de calidad de sus productos en O Mosteiro ► La empresa encargada de la valoración evaluó 1.300 viñas con una superficie de ocho millones de metros cuadrados
