El exalcalde de Portas Roberto Vázquez descarta la posibilidad de presentar la dimisión como concelleiro tras la segunda sentencia emitida a raíz de la incapacidad laboral permanente que le fue reconocida a Mónica Ferro, la asistenta social, a consecuencia de una agresión sufrida en el año 2012, cuando era el regidor municipal.
"Non me queda máis remedio que acatala, pero outra cousa é que estea de acordo", afirmó este martes.
Vázquez argumentó que el Gobierno local que presidía no desatendió sus deberes porque la víctima de la agresión, cuyo autor fue un vecino de la parroquia de Romai y que se produjo en el aparcamiento, cuando accedía a su puesto de trabajo, no denunció haber sufrido amenazas anteriormente ni que le pincharan la rueda del coche en el Cuartel de la Guardia Civil ni en el Concello, y desvinculó este suceso con la aparición de pintadas en la Casa Consistorial, que se produjo anteriormente.
El BNG mantiene que debe renunciar a su acta de edil y pide explicaciones y transparencia al alcalde, Víctor Estévez, "polas decisións tomadas, que teñen agravado as consecuencias do accidente laboral".
Roberto Vázquez descarta dimitir tras la sentencia de la asistenta social
El exalcalde de Portas mantiene que no tiene ninguna responsabilidad en la agresión sufrida por la trabajadora ni por el fallo que obliga al Concello a pagar una indemnización de 230.693 euros
