Tuvo una despedida acorde con su personalidad: sencilla. Así era él y así quisieron darle el último adiós sus familiares, amigos y vecinos. Cientos de personas acudieron en la tarde de ayer al funeral del exalcalde de Silleda Juan José Salgueiro Montouto, fallecido de forma repentina en la madrugada del pasado martes a los 68 años. La iglesia parroquial de Santirso de Manduas se quedó pequeña para acoger a sus allegados y compañeros de partido (PP), que quisieron acompañar a la familia en el sepelio.
El féretro de quien durante doce años –entre 1987 y 1999– rigió la Alcaldía trasdezana partió alrededor de las cuatro y media de la tarde del Tanatorio de Silleda. La capilla ardiente recibió constantes visitas desde primera hora del día y al Concello llegó un escrito de condolencia del Parlamento de Galicia, firmado por su presidenta, Pilar Rojo. Durante la mañana acudieron a dar el pésame a los allegados de Salgueiro personalidades como los exconselleiros populares y miembros del Consello de Contas Xesús Palmou y Dositeo Rodríguez, y por la tarde se dieron cita todos los alcaldes dezanos, así como la senadora socialista y exregidora Paula Fernández Pena; el exalcalde de Silleda José Fernández Viéitez; ediles de la Corporación y de municipios limítrofes; el portavoz del BNG local, Matías Rodríguez da Torre, y trabajadores municipales. No faltó tampoco representación de Tabeirós-Terra de Montes. Entre los asistentes estuvieron los exalcaldes de Cerdedo y A Estrada José Luis Jorge Caramés, y Ramón Campos, respectivamente, y, ya iniciado el funeral, se sumó la mandataria de Forcarei, Belén Cachafeiro.
Tampoco quisieron faltar a la última despedida el presidente de la Deputación de Pontevedra, Rafael Louzán, y el vicepresidente de la Xunta, Alfonso Rueda, cuyo padre fue compañero de Corporación del finado antes de que este llegase a la Alcaldía. Rueda se presentó directamente en la iglesia, donde segundos antes de la entrada del féretro dio el pésame a la viuda de Salgueiro, y a sus hijos, Cristina y Juan. Lo hizo acompañado de los presidentes del PP local y comarcal, José Luis Espiño y José Crespo, respectivamente. Más tarde, se incorporó a los actos fúnebres el presidente de la Deputación, Rafael Louzán. Y entre la familia popular también pudo verse a los jefes territoriales de Medio Rural e Mar y de Medio Ambiente, Miguel Pérez Dubois y José Luis Díaz, respectivamente.
La misa fue oficiada por el cura de la parroquia, José Espiño Matos, gran amigo de Salgueiro. "Es un gran dolor para mí y para la parroquia" despedir a "un hombre sencillo, siempre alegre, servidor desinteresado", dijo en alusión no solo a su labor al frente de la Alcaldía sino también como vecino y feligrés. "Debemos colaborar los unos con los otros como lo hizo don Juan; él estaba siempre dispuesto a ayudar, con gusto", en las actividades sociales, culturales y religiosas. "Siento muchísimo su pérdida, como amigo, como hombre de Iglesia, como hombre trabajador", añadió. Junto a él, participaron en el oficio los párrocos de Silleda, José Pérez y Julio Insua; el padre Katanga, de A Saleta; los curas de Ponte y Piñeiro, Luis Galego y Manuel Villar, respectivamente, y don Manuel, procedente de A Ulla. También los vecinos quisieron hacer un agrecimiento a quien siempre supo separar lo personal de lo político y logró ejecutar muchas de las infraestructuras fundamentales de Trasdeza. Javier López Caramés, teniente de alcalde con Fernández Viéitez, y amigo de Salgueiro, recordó las gestiones realizadas por el finado en el municipio y valoró su intensa labor desempeñada.
